La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha solicitado medidas cautelares en favor de la población de Tamaulipas por los operativos que ahí lleva a cabo la Secretaría de Marina (Semar), los cuales han provocado en los primeros meses del presente año 32 quejas por desapariciones forzadas, ejecuciones, tortura, cateos ilegales y detenciones arbitrarias.

De acuerdo con el oficio número V2/29651 fechado el 10 de mayo, al que ha tenido acceso La Jornada, dirigido al vicealmirante Hilario Durán Tiburcio, la CNDH señala que es urgente garantizar el respeto al derecho a la vida, a la integridad física, a la seguridad jurídica y personal, así como al patrimonio de los habitantes de Tamaulipas.

A pesar de esta inédita medida de la CNDH, esta semana se han registrado otras cuatro desapariciones forzadas, según afirma en entrevista Raymundo Ramos Vázquez, director del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.

En cinco meses tenemos registrados 90 casos de desaparición forzada a manos de marinos, pero no toda la gente quiere denunciar por miedo. Veinte de estos desaparecidos ya fueron encontrados sus cuerpos con huellas de tortura, con un disparo en la nuca y todas las características de ejecuciones arbitrarias y extrajudiciales.

Añade: Estamos muy preocupados por los operativos que está realizando un grupo de operaciones especiales de la Marina en Tamaulipas, particularmente en Nuevo Laredo. Han sembrado el terror. Están apareciendo los cuerpos en fosas clandestinas y hay un patrón de conducta militar que demuestra su participación.

La CNDH ha estipulado que en atención al principio pro persona, las medidas cautelares incluyen dar instrucciones a los marinos para que todo operativo que realicen se lleve a cabo con pleno respeto a los derechos humanos y en apego a los principios de racionalidad, oportunidad, legalidad, congruencia y proporcionalidad: para salvaguardar debidamente a la población civil.

Asimismo, solicita a la Semar no incurrir en detenciones arbitrarias, retenciones ilegales, trato cruel y/o degrante, tortura ni imputación indebida de hechos”.

Los visitadores de la CNDH, junto a representantes de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU), estuvieron durante varios días en Nuevo Laredo entrevistando a familiares de las víctimas.

Se llevaron a mi marido, se llevaron el disco duro de la computadora y dinero; yo estaba ahí. A mí no me puede venir a decir nadie que no fue la Marina. Fueron marinos, porque yo los vi totalmente equipados, entrenados, en un operativo bien realizado, eran seis con el uniforme de esa dependencia, dijo a los representantes de la CNDH y la ONU Jessica Molina Rodríguez, esposa de José Daniel Trejo García, desaparecido a manos de los uniformados.

Cuenta que los integrantes de la Semar entraron el pasado 27 de marzo a su domicilio, ubicado en la colonia Mirador de Nuevo Laredo, aproximadamente a la 1:30 de la madrugada, sin orden de cateo o aprehensión. No te hagas pendeja, dinos a qué se dedica tu marido, le gritaron al entrar a la habitación donde ambos dormían, mientras un elemento revisaba el celular de su esposo: Ya valiste madre, le dijo, y a continuación se lo llevaron.

El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo ha presentado ante organismos de defensa de los derechos humanos tanto nacionales como internacionales una lista preliminar de 42 personas desaparecidas, algunas encontradas ya en fosas clandestinas.

“Tenemos casos de allanamiento de domicilios, detenciones en la via pública y traslados a cuarteles de la Marina o a zonas despobladas, donde llevan a cabo interrogatorios con base en tortura y finalmente la ejecución con arma de fuego”, dice Ramos Vázquez.

Añade: los marinos no han respetado ni a mujeres ni a niños. El listado incluye 42 casos, pero hay que sumarle cuatro más de esta semana, con lo cual suman 46, pero cada día aparecen cuerpos o desaparecen personas a pesar de las medidas cautelares emitidas por la CNDH en favor de la población de Tamaulipas.

El último desaparecido a manos de la Marina se registró el 17 de mayo. Se trata de José Luis Bautista Carrillo, de 32 años, trabajador en un deshuesadero de automóviles y a quien se lo llevaron con otro compañero. Las fotos muestran las camionetas de la Marina.

Acoso y persecución

Debido a su trabajo, el defensor de derechos humanos Ramos Vázquez ha sufrido amenazas, acoso y persecución por parte de elementos de la Marina, el último hace unos días en un retén de esa dependencia.

El activista afirma que iban en dirección al poblado de Colombia, donde les avisaron de una fosa clandestina: La información había sido proporcionada de manera confidencial por un familiar de una de las víctimas, que fue puesta en libertad por elementos de la Marina después de ser detenida de manera arbitraria, torturada y amenazada con privarle de la vida en caso de denunciar.

Agrega: Esta labor en defensa de los derechos humanos nos ha situado como blanco de ataques de campañas de desprestigio, intimidatorias, amenazantes y denigrantes a través de las redes sociales de actores que presumimos pertenecen a las fuerzas armadas.

Por ello, destacó la importancia de ordenar a los marinos videograbar sus acciones: Estos operativos están afectando a la población de escasos recursos, en sectores marginados. Lamentablemente, a pesar de todas las pruebas de videos, fotos y testimonios, la Semar no está reconociendo nada.

Exigió suspender los patrullajes de la dependencia en Nuevo Laredo, mientras se investigan las denuncias en su contra: Hay cuerpos que están sin identificar en una funeraria de Nuevo Laredo, hay denuncias que no se han realizado formalmente por la desconfianza hacia las autoridades investigadoras tanto a escala local como federal en Tamaulipas, que no realizan su trabajo para detener a los responsables porque se trata de marinos.

Explica que el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, está de acuerdo con los operativos de la Marina, a pesar de las decenas de denuncias por graves violaciones a los derechos humanos.

La Semar evade su responsabilidad diciendo que no es su personal el causante de estos crímenes y señalando que son personas con uniformes apócrifos, pero tampoco ha hecho nada para investigar qué está haciendo su personal, que tiene 30 días que no presenta un solo detenido ni hace un solo decomiso, dice Ramos Vázquez.

“La Marina –agrega– está haciendo un operativo de terror y esto involucra a altos funcionarios de la dependencia, que han autorizado esto. El gobernador ha sido omiso con las familias de las víctimas y está vinculado a este operativo carnicero, como le llamaron las víctimas, por desaparecer y sepultar de manera clandestina a sus familiares, comportándose peor que los propios delincuentes”.

Exigió finalmente la búsqueda de los desaparecidos, la apertura de fosas clandestinas y de los cuarteles de la Marina y el castigo a los culpables por parte de la Procuraduría General de la República: Nos están dejando solos frente a estos criminales uniformados.