Toronto.

La decisión de Estados Unidos de no prolongar las exenciones de aranceles al acero y al aluminio de Canadá y la Unión Europea molestó a sus socios comerciales, que anunciaron medidas recíprocas y recursos ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Canadá, el mayor abastecedor de acero a Estados Unidos, impondrá aranceles hasta de 12 mil 800 millones de dólares a productos estadunidenses, mientras la Unión Europea sancionará con mil 600 millones de dólares, equivalentes a los que aplicará Estados Unidos a los metales.

Las tarifas canadienses de entre 10 y 25 por ciento a la importación de 130 productos estadunidenses incluyen al whiskey, jugo de naranja, acero, aluminio y otros productos, afirmó la canciller canadiense Chrystia Freeland. Los impuestos se aplicarán a partir del primero de julio y estarán vigentes hasta que Estados Unidos exente a este país del arancel siderúrgico.

El gobierno estadunidense tomó una decisión que deploramos y obviamente va a llevar a medidas de represalia, como debe ser, afirmó el primer ministro canadiense, Justin Trudeau. Afirmó que las medidas tarifarias son totalmente inaceptables y, en una conferencia de prensa con Freeland, agregó que tenemos que creer que en algún momento prevalecerá el sentido común.

El gobierno canadiense adelantó que llevará la querella a los tribunales del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y de la OMC.

Hoy es un mal día para el comercio mundial, dijo la comisaria de Comercio de la Unión Europea (UE), Cecilia Malström, quien en días recientes negoció sin éxito para exentar de manera definitiva a la unión de las tarifas arancelarias de Washington. La comisaria acusó a la Casa Blanca de usar la amenaza de restricciones comerciales para obtener concesiones de parte de los europeos.

La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que la Unión Europea reaccionará de manera firme y unida. El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, expresó que a la política de Estados Unidos de America First hay que responder con EU United (Unión Europea unida)”.

El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó la decisión de ilegal y de error, así se lo externó al presidente estadunidense Donald Trump, en una conversación telefónica este jueves, mientras el ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, afirmó que los países de la UE nunca aceptarán negociar bajo presión con Estados Unidos y afirmó que así se lo hizo saber personalmente al secretario de Comercio estadunidense, Wilbur Ross. Depende totalmente de las autoridades estadunidenses si desean ingresar a un conflicto comercial con su mayor socio: Europa, aseguró.

Alemania apuntó que teme que los aranceles al acero y al aluminio se apliquen también contra los automóviles. El gobierno estadunidense inició la semana pasada una investigación de seguridad nacional sobre las importaciones de autos, usando la misma ley aplicada para reducir las compras de acero y aluminio al exterior.