Demanda Jarab medidas estructurales de prevención de agresiones al gremio en la entidad
zona silenciadapor el gran nivel de autocensura de periodistas: ONU
Llama a autoridades a investigar pronto y de forma debida el asesinato del corresponsal de Imagen
Viernes 1º de junio de 2018, p. 13
Tamaulipas es una zona silenciada
por el alto nivel de autocensura en que operan los periodistas ante la violencia extrema en su contra, señaló la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH).
El reciente asesinato de Héctor González Antonio, corresponsal de Grupo Imagen en esa entidad, es muestra de las agresiones contra el gremio en esta entidad, la segunda más peligrosa para el ejercicio periodístico, con 17 comunicadores ultimados de 2000 a la fecha, sólo después de Veracruz, que suma 21.
Jan Jarab, titular de la representación en México de la ONU-DH, aseveró que el homicidio de González Antonio es un recordatorio más de la situación de alta vulnerabilidad y violencia que enfrentan los periodistas en México. Este año, como en 2017, hemos visto un promedio de uno asesinado por mes
.
En los primeros cinco meses de este año han sido ultimados seis comunicadores en diversos puntos del país, y durante 2017 fueron 12, entre ellos los corresponsales de La Jornada en Chihuahua y Sinaloa, Miroslava Breach y Javier Valdez, respectivamente.
Frente a esa realidad, Jarab enfatizó en la necesidad de que las autoridades desarrollen medidas estructurales de prevención de agresiones que favorezcan ambientes en los que los comunicadores puedan trabajar sin este alto riesgo a sus vidas, las cuales no han sido implementadas en el estado de Tamaulipas
.
Héctor González Antonio también era director del portal Todo Noticias. Tenía una trayectoria reconocida como reportero en dicha entidad y cubría un rango amplio de temas, incluyendo sucesos políticos y criminales, apuntó la oficina de las Naciones Unidas.
La ONU-DH hace un llamado a las autoridades correspondientes para conducir una investigación pronta y debida del asesinato, que presente resultados en un plazo razonable, además de adoptar medidas estructurales que puedan generar cambios en las condiciones de trabajo de los periodistas.
Lamentó el crimen y expresó sus condolencias y solidaridad con la familia periodística de González Antonio.
En su informe Zonas silenciadas: regiones de alta peligrosidad para ejercer la libertad de expresión, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos lamentó que en Tamaulipas los comunicadores y los propios medios informativos se hayan visto obligados a callar y dejar de publicar información relacionada con el crimen organizado, la violencia y la probable complicidad de las autoridades con estos grupos.
El reporte da cuenta de que desde 2000, antes del inicio de la llamada guerra contra el narcotráfico, en esta entidad se dieron ataques e intimidaciones del crimen organizado hacia medios y sus trabajadores.