Más de mil han sido separados de sus padres indocumentados
Sábado 2 de junio de 2018, p. 21
Nueva York.
Ira y dolor nutrieron protestas en más de 25 ciudades contra la política migratoria de Donald Trump que separa a niños –algunos tan pequeños como de 18 meses– de sus familias al ingresar a este país.
En el Día de Acción Nacional por los Niños, en el cual la consigna común fue la de las familias pertenecen juntas
, líderes religiosos cristianos y judíos (algunos recordando a los cientos de niños que huían de los nazis, a los que se les negó la entrada en Estados Unidos en 1939), organizaciones de defensa de migrantes y de libertades civiles, la Alianza Nacional de Trabajadores Domésticos, dreamers, maestros y algunos políticos repudiaron las medidas que han separado a más de mil niños de sus padres de octubre pasado a la fecha.
Bajo las medidas de tolerancia cero
impuestas por el gobierno de Trump, todo indocumentado que llegue a este país –aun los que están solicitando asilo– será sujeto a procesos criminales y separado de sus hijos (casi 700 menores de edad han sido separados de sus padres entre octubre y abril, y otros 658 sólo entre el 6 y el 18 de mayo). [www.jornada.com.mx/2018/ 06/01/mundo/029n1mun].
En Nueva York, en un mitin frente a los tribunales, cientos de manifestantes marcharon en silencio alrededor del edificio de oficinas federales –entre las cuales está la agencia de migración–, en una protesta en la que, según Juan Carlos Ruiz, del movimiento Nuevo Santuario, el silencio rompía el ruido oficial
. Al final se lanzó un grito colectivo de dolor y esperanza
.
La ex presidenta del concilio municipal de Nueva York, Melissa Mark-Viverito declaró: No vamos a permitir que este presidente destruya a nuestras familias ni nuestra democracia
.
En Washington, más de 250 personas realizaron una manifestación frente al Hotel Trump, a unas cuadras de la Casa Blanca. “Todos los días el gobierno de Trump separa intencionalmente a niños de sus familias. Arrebatan a niños de los brazos de sus madres en entradas fronterizas. Los dreamers viven en un limbo, madres y padres son detenidos en sus lugares de trabajo y apartados de sus hijos. Esto es una abominación moral”, afirmó la reverenda Jennifer Butler.
Criminalizar familias y separar niños de sus padres es una práctica que pasma a todos. Peor: continúa. Por eso estamos aquí
, afirmó Gustavo Torres, director de CASA, organización de apoyo a migrantes en Maryland.
Hubo actos parecidos en Miami, Oakland, Houston, Los Ángeles y Chicago, entre otras ciudades [https://www.familiesbelongtogether.org].
(Más información sobre estos temas: www.jornada.com.mx/sinfronteras )