En los últimos ocho años la matrícula de estudiantes de medicina aumentó en casi 50 por ciento, al pasar de 90 mil en 2010 a 135 mil en 2018. Ahora, el reto es ampliar la plantilla laboral en las instituciones de salud para responder a la demanda de atención con calidad y oportunidad, afirmó el secretario de Salud, José Narro Robles.

El funcionario participó ayer en el sexto Congreso Internacional de Educación Médica y quinto de Simulación, el cual se realizó en Mazatlán, Sinaloa, y donde participaron académicos de la Asociación Mexicana de Facultades y Escuelas de Medicina AC (AMFEM).

Comentó que la suma de esfuerzos permitió aumentar la inversión para el financiamiento de becas para los pasantes e incrementar sus prestaciones durante el servicio social e internado de pregrado. En este último se duplicó el monto de la ayuda económica para quienes lo realizaron en áreas marginadas o suburbanas. Con esto, el año pasado hubo 14 mil pasantes de medicina, 38 mil 500 de enfermería y 11 mil 600 de otras áreas como sicología, ciencias de la nutrición y química, entre otras.

Narro Robles mencionó que para el posgrado se cuenta con un sistema de formación de recursos humanos sólido con más de 30 mil residentes de medicina en todas las instituciones públicas y privadas del país, de los cuales 81 por ciento se prepara en el Instituto Mexicano del Seguro Social y en la Secretaría de Salud.

En esta área también hay un reto porque la demanda para la realización de una residencia rebasa la capacidad de las instituciones. Sólo el año pasado se registraron en el Examen Nacional de Residencias Médicas 38 mil 600 aspirantes y sólo se abrieron ocho mil 263 plazas.