El Gobierno de la Ciudad de México, con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el gobierno federal, invertirán 300 millones de pesos para la conservación y reactivación de la zona chinampera de la capital, que ayer recibió el certificado que la acredita como Sitio Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM).

El objetivo, señalaron el representante en México del organismo internacional, Crispim Moreira, y el jefe de Gobierno local, José Ramón Amieva, es reactivar la producción agrícola de la zona y preservar los agrosistemas tradicionales para mantener la producción de alimentos sustentables para la ciudad.

En un acto realizado en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el mandatario capitalino señaló que de las 20 mil chinampas que existen, sólo poco más de 3 mil están en perfecta funcionalidad, de allí la necesidad de iniciar un proceso de rehabilitación de la zona, que estará bajo la supervisión de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial.

Ante chinamperos, señaló que sólo 50 sitios en el mundo son considerados SIPAM, y destacó que la forma de agricultura de las chinampas se mantiene intacta, con una generación de alimentos orgánicos, saludables y nutritivos.

Por ello, agregó, es necesario rescatar la zona chinampera, para que cuente con un sistema de riego que la proteja de la contaminación y establecer un esquema, mediante las cadenas cortas alimentarias, que garanticen que sus productos lleguen a toda la ciudad.

Crispim Moreira expresó que el sistema de chinampas de la ciudad promueve la sustentatibilidad, salvaguarda la biodiversidad y protege el medio ambiente, además de impulsar el desarrollo social y económico.

Son un legado de los aztecas para el futuro de la humanidad, que necesitan ser preservadas, manifestó el representante de la FAO en México.