Saransk

Todo mal, rematadamente mal, para Colombia. Hace cuatro años lograron su mejor papel en mundiales al llegar al quinto partido. Esta vez, las expectativas eran altas. Pero en lugar de comenzar de manera triunfal en Rusia 2018, Colombia tuvo un debut de pesadilla, víctima de sus propios errores y llevándose una bofetada de Japón, que ayer se impuso 2-1. Un desastre que detonó con la expulsión de su volante central Carlos Sánchez, una mano infame que costó un penal y su expulsión para dejarlos con un hombre menos desde el inicio del partido.

Ante un rival al que había goleado en Brasil 2014 rumbo a un histórico avance a los cuartos de final, Colombia tuvo todo menos el trámite fácil que algunos daban por hecho para arrancar en el Grupo F.

Un gol de cabeza de Yuya Osako a un tiro de córner a los 73 minutos sentenció un partido que fue de espanto desde el silbatazo inicial para los dirigidos por el técnico argentino José Pekerman. Colombia se vio en desventaja desde los cuatro minutos, cuando Sánchez recibió la roja directa al desviar con el antebrazo un remate de Shinji Kagawa, con lo que se decretó además la pena máxima.

El propio Kagawa se encargó de concretar, engañando a David Ospina a los seis minutos. A partir de allí comenzó el calvario para Colombia, que prescindió en el comienzo de James Rodríguez. El máximo goleador del pasado Mundial no pudo ir desde el inicio por una sobrecarga muscular. Los de Pekerman reaccionaron casi al final del primer tiempo y emparejaron el partido con la sorprendente malicia de un tiro libre de Juan Quintero a los 39, quien engañó a la barrera, y les mandó el balón por abajo.

El atacante japonés Shinji Okazaki se volvió un malestar como efecto por la expulsión de Sánchez.

Japón logró algo inédito para una selección asiática en un Mundial: venció a un conjunto de Sudamérica en la máxima cita del futbol.

Fue otro resultado inesperado en un torneo lleno de sorpresas. Y éste sorprendió más, puesto que Japón cambió de técnico poco antes del certamen, y porque los asiáticos no habían podido superar a un adversario en 17 enfrentamientos previos en un Mundial.

El estreno colombiano marcó al mismo tiempo el debut mundialista de su ariete y cañonero Radamel Falcao, quien se perdió el Mundial de Brasil debido a que no se recuperó a tiempo de una lesión de ligamentos. Con los planes tácticos trastocados por la salida de Sánchez, la pelota no llegó mucho al Tigre Falcao y en las contadas ocasiones que se le presentaron apenas pudo puntear la pelota sin consecuencias para los japoneses. Aun así, incidió en el tanto del empate.

Japón especuló un poco después del gol y permitió que Colombia adelantara sus líneas en busca del empate. Cerca del minuto 40, Falcao fue derribado en las puertas del área y Quintero anotó con un tiro rasante, por debajo de la barrera que saltó. El balón se coló junto a la base del palo que cubría la barrera. El portero nipón se recostó y alcanzó a atraparla, pero lo hizo un poco atrás de la línea, por lo que reclamaba que no había sido gol. Pero la tecnología hizo justicia para los sudamericanos y confirmó que to-da la circunferencia de la pelota rebasó la línea de meta.

En el complemento fueron los japoneses los que más controlaron la pelota y sólo gracias a un par de intervenciones prodigiosas de Ospina no cayó antes el segundo tanto de los asiáticos.

Un tiro de esquina y otra desatención colombiana definieron el encuentro. Yuya se levantó entre varios defensores para cabecear una pelota que sacudió el poste y entró.

Al entrenador Pekerman, con grandes bonos antes del partido, al menos puede encontrar un poco de tranquilidad al ver la reacción que tuvo Colombia tras la expulsión de Sánchez y el tanto de penal.

Cuando el marcador aún estaba empatado, el entrenador argentino echó mano de James, quien de inmediato se enganchó en el partido y llegó con peligro a la meta japonesa. Sin embargo, el mediapunta del Bayern Munich no pudo esta vez marcar la diferencia, y Colombia se fue con una derrota.

James, anotador de seis dianas en Brasil, le imprimió orden y categoría a un equipo cafetero que era puro ímpetu en busca del empate.

Japón tomó provisionalmente la cima del Grupo H, igualado con Senegal, que más tarde venció 2-1 a Polonia.En la próxima jornada, Colombia chocará con Polonia y Japón se las verá con Senegal.