El Gobierno de la Ciudad de México informó que elaborará un sistema de datos personales de los damnificados por el sismo del pasado 19 de septiembre como instrumento para realizar el estudio socioeconómico que permita integrar el censo de afectados por el terremoto.

En un acuerdo publicado en la Gaceta Oficial capitalina se establece que el sistema estará a cargo de la Secretaría de Desarrollo Social local (Sedeso) y que la captura y sistematización de la información levantada en campo tendrá como propósito poseer una base de datos que permita la elaboración del estudio diagnóstico socioeconómico de los afectados.

De esta forma se integrará un padrón de damnificados que será parte fundamental del censo de afectaciones por el sismo. El acuerdo establece que no se realizarán transferencias de datos personales obtenidos.

Señala que la estructura básica del sistema estará conformada por los datos identificativos de los afectados, es decir, nombre, edad, género, domicilio, fotografía, teléfono particular, estado civil, tiempo de residencia en la Ciudad de México; así como afectivos y familiares.

El documento agrega que la información especialmente protegida será la relativa al origen étnico, carencia social, discapacidades, ocupación, grado académico, ingresos, bienes inmuebles, seguro, gravámenes o adeudos, egresos y servicios contratados.

Asignan responsabilidades

La responsabilidad directa de esta información estará a cargo de la Subsecretaría de Participación Ciudadana de la Sedeso y podrá ser utilizada por directores ejecutivos regionales y personal operativo de apoyo en campo adscrita a esa área y tendrán un nivel de seguridad alto.

A principios de año, la Sedeso inició un censo de los damnificados por el sismo en cumplimiento a las disposiciones de la Ley de Reconstrucción el cual no se concluyó. En febrero pasado la dependencia infirmó que había realizado 5 mil 714 estudios socioeconómicos entre las personas afectadas en sus viviendas o negocios por el terremoto y estimaba llegar a 14 mil.

Según los datos recogidos por la secretaría hasta ese momento, 65.6 por ciento de los encuestados fueron mujeres y 34.1 por ciento hombres. De ese universo, 72 por ciento dijo que ingería tres o más alimentos al día, mientras que en 17 por ciento de los hogares visitados se encontró a una persona con algún tipo de discapacidad, además de que la mayor parte de las personas encuestadas dijeron ser empleados o trabajadores independientes.