En los pasados comicios unos ganaron, otros perdieron, pero a final de cuentas todos acreditaron la vitalidad de la democracia mexicana, resaltó el presidente Enrique Peña Nieto, y ubicó la victoria de Andrés Manuel López Obrador como clara, contundente e inobjetable.

En la ceremonia de abanderamiento a la delegación mexicana que participará en los XXIII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, el mandatario hizo un paralelo entre el deporte y la política: en uno y otra, las competencias deben dejar la satisfacción de haber podido participar en ellas.

Además, el gobierno garantizó un ambiente ordenado, de tranquilidad y de paz para la realización de los comicios de forma ordenada, cívica y tranquila.

El jefe del Ejecutivo reiteró que su encuentro del martes con el virtual ganador de los comicios presidenciales fue respetuoso y cordial.

Enfatizó que al haber trazado en esa cita la ruta para iniciar el proceso de transición –una vez que reciba López Obrador la constancia de presidente electo– eso genera un espacio y proyecta certidumbre hacia el exterior y hacia los propios mexicanos de que aquel puede darse de forma ordenada. Eso es justamente lo que ocurrió (el martes) en la reunión en Palacio Nacional, indicó Peña Nieto.

Reiteró entonces la voluntad, disposición y compromiso de su gobierno para iniciar el proceso de transición con el próximo presidente y sus colaboradores.

En la parte final de su mensaje ante los deportistas, y acompañado de su esposa, Angélica Rivera, el mandatario refirió que los meses recientes el país vivió una intensa competencia política en la disputa de distintos cargos de representación popular. Ubicó la jornada electoral como cívica y armoniosa, donde se demostró que los mexicanos tienen vocación democrática.

Cada cierto tiempo, añadió, los mexicanos se dan tiempo para reflexionar sobre las propuestas y los personajes que compiten para elegir de manera mayoritaria a quien confiar las distintas responsabilidades de gobierno.

Quiero nuevamente reconocer la participación de todos los que jugaron en esta competencia; unos ganaron y otros perdieron, pero acreditaron la vitalidad de nuestra democracia que hemos venido fortaleciendo.

Resaltó además la amplia participación de entre 63 y 65 por ciento de los electores, los cuales acreditaron su interés para con su voto decidir quiénes serán los próximos gobernantes.

Peña Nieto reconoció una vez más a todos aquellos que jugaron en esta competencia política. Hubo ganadores y perdedores, pero la democracia mexicana salió fortalecida, y eso hicieron las otras expresiones políticas cuando asumieron a quien resultó ganador en cuanto conocieron las tendencias irreversibles en las urnas.