El próximo gobierno federal deberá tener como prioridad descentralizar el sistema aeroportuario mexicano como sustento para desarrollar las tres regiones en que se divide la República, sostuvo Rafael Hernández Soriano, diputado que encabeza la comisión que revisa los contratos firmados por la actual administración con empresas privadas para construir el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Al comentar las posiciones iniciales de quienes desempeñarán cargos de responsabilidad en torno a la nueva terminal aérea, el legislador perredista consideró que la posibilidad de utilizar la base aérea de Santa Lucía como aeropuerto alterno al Benito Juárez, genera confusión, esa determinación debe sustentarse en profundos estudios técnicos, y no por consideraciones políticas. Cualquier decisión deberá ser precedida de un exhaustivo y profundo análisis técnico, económico y financiero que sustente la alternativa que se vaya a impulsar.

–¿Considera usted que las obras del nuevo aeropuerto deben continuar su marcha?

–Yo soy partidario de que la obra continúe, pero que se hagan ajustes, tanto en el terreno fiscal como en la resolución de las afectaciones a las comunidades aledañas a la obra, y en términos de transparencia revisar el papel que juega el actual secretario de comunicaciones y transportes Gerardo Ruiz Esparza.

Hernández Soriano, quien ha denunciado los problemas sociales, producto de la megaobra, insistió en que el aeropuerto debe ser un tema que manejen especialistas en aeronáutica, ingenieros especializados en obras de aviación, arquitectos y sociólogos, para que de ellos surja una propuesta específica que lleve al gobierno y al pueblo de México a repensar la obra; que de ella no surjan negocios como los que Gerardo Ruiz Esparza cuida.

El que esté pensando en suspender la obra debe tener argumentos muy sólidos, no me atrevo a pensarlo.

–Con miras a 2050, ¿podría tratarse de un elefante blanco?

–Es preciso que las afectaciones negativas a las comunidades se corrijan, que haya una integración social y económica de la región muy efectiva. Es necesario imponer la transparencia como modo de operación en la obra. Se deben transparentar los contratos y los compromisos financieros con la banca internacional, que ya alcanzan los 7 mil millones de dólares.

–¿La descentralización implica criterios de seguridad nacional?

–El aeropuerto no es sólo un negocio, es un instrumento básico de seguridad nacional. Ahí llega toda clase de persona y artículos, transita de todo, y eso no se puede dejar en manos de particulares. Por eso cuando hablamos de concesión, debemos tener conciencia de qué estaríamos afectando, o por lo menos tocando la seguridad nacional.