El gobernador del estado de Guanajuato, Miguel Márquez, y el coordinador del Partido Acción Nacional (PAN) en San Lázaro, Marko Cortés, son muy buenos candidatos para ocupar la presidencia de dicho instituto político, destacó el coordinador de los senadores panistas, Fernando Herrera, en momentos en que Jorge Luis Lavalle anunció que seguirá impugnando su expulsión de ese partido.

En opinión de Herrera, “Marko Cortes es un digno representante del blanquiazul, es brillante y conoce al partido. Márquez también es un extraordinario prospecto. Ambos representan una opción dentro del PAN”. Aunque reconoció a compañeros suyos de bancada que se han inscrito –entre ellos Ernesto Ruffo y Jorge Luis Rodríguez–, el coordinador de los senadores del PAN indicó: Yo simpatizo con Marko Cortés y reconozco la valía que tiene el gobernador Márquez. Creo que es importante que ambas trayectorias, más las que se vayan presentando, se sometan al escrutinio de la militancia y se escoja una dirección fuerte

–¿Podría ser Márquez el presidente del PAN y Marko el secretario general? –se le preguntó.

–O al revés. Los dos tienen características suficientes.

En entrevista, Herrera manifestó que la nueva dirigencia (la cual debe elegirse en el segundo semestre de este año) ha de plantearse una redefinición del papel del PAN. Somos un partido político que debe entender su papel de oposición ante las nuevas circunstancias. Se tienen que renovar los 32 comités estatales del PAN en el país y también la dirigencia nacional, dijo.

Mientras tanto, el senador Jorge Luis Lavalle, expulsado del PAN en víspera de las elecciones del primero de julio pasado, afirmó que la dirigencia del partido tendrá que notificarle del proceso sancionador iniciado en su contra y de su presunta separación de esta fuerza política, luego de una resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) sobre el tema.

De esa manera, señaló que podrá defenderse tanto en las instancias internas del partido como volver a recurrir a los magistrados.