Guadalajara, Jal.

Celina Trinidad y Félix Espíritu Parra, quienes bloquearon el basurero municipal de Tapalpa junto con otros 20 pobladores de la comunidad de Atacco y fueron detenidas y acusadas de ‘‘obstrucción de la obra pública’’, permanecieron cerca de 12 horas en la Fiscalía Regional Sur, con sede en Ciudad Guzmán, hasta la medianoche del lunes.

Los habitantes de la delegación municipal de Atacco –ubicada 140 kilómetros al sur de Guadalajara– han obtenido recursos legales, acuerdos firmados y hasta multas contra el ayuntamiento para que sea cerrado el vertedero ubicado cerca de sus hogares, por causar daños ambientales y a la salud.

Hace unos días Morales regresó a la presidencia municipal y una de sus primeras órdenes fue detener a Celina, de 51 años, y a Félix, de 54, quienes encabezan la oposición al vertedero, y enviarlas a Ciudad Guzmán con la intención de que fueran procesadas penalmente.

‘‘Salieron sin cargo alguno. Las querían acusar de obstrucción a obra pública. Ni siquiera sé si eso está tipificado en el Código Penal de Jalisco’’, dijo Guadalupe Espinoza Sauceda, del colectivo de abogados que asesora al Consejo Ciudadano de Atacco.

Luego de la detención, realizada a las afueras del basurero, pobladores siguieron a los policías al palacio municipal de Tapalpa y de ahí a Ciudad Guzmán, donde una treintena de habitantes de Atacco exigieron la liberación de Celina y Félix.

El Consejo Ciudadano de Atacco advirtió que continuará con su lucha hasta conseguir el cierre definitivo del vertedero, a pesar de la represión ejercida por el alcalde Morales. Sostuvieron que su lucha es justa y la respaldan acuerdos, convenios y medidas cautelares emitidas por la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.