En México, cada año se pierden más de 400 millones de horas laborales a causa de la diabetes y otras enfermedades asociadas al sobrepeso y la obesidad, lo que equivale a 184 mil 851 empleos de tiempo completo, reportó el Observatorio Mexicano de Enfermedades no Transmisibles (Oment).

Además, esa organización estima que un adulto de 45 años con obesidad y prediabetes puede llegar a invertir hasta 65 mil pesos al año en gastos médicos de tratamiento, cuando en promedio gana en ese periodo sólo 61 mil 896.

Con los datos contenidos en su último reporte, el Oment ratificó que México ocupa el segundo lugar en obesidad adulta a nivel mundial y más de 15 por ciento de su población adulta tiene diabetes, lo cual representa una enorme erogación de recursos por parte de las instituciones de salud pública en enfermedades que son prevenibles.

En un comunicado, el Foro Consultivo Científico y Tecnológico señala también que México es el país miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con mayores admisiones hospitalarias de adultos por esta enfermedad.

Entre 60 y 70 por ciento de quienes padecen sobrepeso deben su condición a factores alimenticios, sociales, culturales y al estilo de vida. Aunque la inversión de tiempo y dinero para hacer ejercicio y comer sano generalmente parecen excesivas a primera vista, ésta palidece si se la compara con la derrama económica que implicaría a la persona no hacerlo, indica el mismo reporte.

Ante esta realidad, parece que la Estrategia Nacional para la Prevención y Control de la Obesidad y la Diabetes, puesta en marcha desde 2013 por el gobierno federal, no ha dado los resultados esperados. A su vez, instituciones como el Fccyt, academias y grupos de divulgación brindan su apoyo al informar a la población sobre la diabetes, el sobrepeso y la obesidad para generar una conciencia sobre los riesgos de padecerlas, con el fin de que haya un cambio de mentalidad y de hábitos con respecto a la alimentación sana y a la importancia de hacer ejercicio.