En México, 55.3 por ciento de personas mayores de 65 años carecen de pensión o salario
Jueves 26 de julio de 2018, p. 37
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) alertó que México y Latinoamérica tienen brechas sobre la cobertura de protección social que deben cerrarse de manera impostergable.
De acuerdo con el estudio Panorama laboral: presente y futuro de la protección social en América Latina y el Caribe, presentado ayer por este organismo, la cobertura promedio de derechos como pensiones, asistencia médica o acceso a vivienda, entre otros, aumentó en promedio en el continente unos ocho puntos porcentuales, para pasar de 36.6 por ciento en 2005 a 44.6 por ciento en 2015.
En ese mismo lapso de 10 años, México sólo pudo aumentar en 1.2 por ciento su cobertura de seguridad social para alcanzar apenas en 2015 el 31.6 por ciento, por lo que tuvo un crecimiento mucho menor que el resto.
Uruguay, por ejemplo, logró en 2015 ofrecer seguridad social a 75.6 por ciento de sus habitantes; Costa Rica llegó a 68.1 y Chile cubre a 67.8 por ciento. Abajo de México se encuentra Bolivia, al final de la lista, con una cobertura de 17.4, así como algunos países de Centroamérica como Honduras, Guatemala y El Salvador.
En el caso de personas mayores de 65 años, México también se localiza al final de la tabla, ya que 55.3 por ciento no tienen ni pensión ni salario.
Sólo 18.8 por ciento de las personas en este rango de edad en el país reciben una pensión, 24.1 por ciento se mantienen trabajando ya que no reciben otro ingreso, y 1.8 laboran a pesar de tener pensión.
Al presentar el documento, el director regional de la OIT en Latinoamérica, José Manuel Salazar-Xirinachs, junto con Fabio Bertranou, director de la oficina de la OIT para el cono sur y coordinador del informe, explicaron que muchos adultos mayores trabajan porque las pensiones no les alcanzan, pero recalcaron que la mayoría simplemente no tiene ningún ingreso.
En 2050 se estima que habrá 155 millones de personas mayores de 65 años, se va a multiplicar por cinco, por eso señalamos que es uno de los grandes retos en materia de protección social; aunque aún hay bono demográfico, muchos países de América Latina ya van saliendo
, agregó José Manuel Salazar.
Los especialistas hicieron un llamado a las autoridades de los países latinoamericanos para atender dichos factores y retomarlos dentro de las políticas públicas.
Como retos hacia el futuro, el informe plantea poner principal atención en medidas que soporten los ciclos económicos y que, aún en fases de crisis financieras, se mantenga la ayuda social. Además, debe prever los tipos de trabajo que se crearán en los próximos años, la transición demográfica en cada país, las necesidades de los ciudadanos y los cambios climáticos.