Integrantes del Comité de Familiares de Personas Detenidas Desaparecidas en México Alzando Voces, de Michoacán, denunciaron acoso y amenazas de ‘‘emisarios del gobierno’’ por insistir desde hace 11 años en que sean presentadas con vida 300 personas desaparecidas, 50 de ellas ‘‘por motivos políticos’’.

Cristina y Janahuy Paredes Lachino, integrantes de la organización, siguen buscando a su padre, Francisco Paredes Ruiz, integrante de la Fundación Diego Lucero y guerrillero en la década de 1970.

Desde 2016, dijeron, sujetos armados han ido a su vivienda en varias ocasiones a exigirles que paren ‘‘con el asunto de los desaparecidos’’. Hace unas semanas desconocidos desmantelaron el sistema de videovigilancia de la casa de su hermano.

‘‘Les hemos dicho (a las autoridades) que no vamos a parar. Se ha criminalizado nuestra lucha y han ignorado nuestras demandas. Hace mes y medio vimos el expediente, y no tiene nada’’, expresó Janahuy Paredes.

Cristina Paredes recordó que su padre desapareció el 26 de septiembre de 2007 en la salida de Morelia a Salamanca. ‘‘Testigos dijeron que agentes federales se lo llevaron’’.

En 1968 Francisco Paredes se unió a la lucha estudiantil y en 1970 se incorporó al Movimiento de Acción Revolucionaria. ‘‘A principios de 1971 fue detenido con otros jóvenes por la Dirección Federal de Seguridad. Estuvo aislado en el Campo Militar Número Uno.

‘‘Un mes después fue presentado ante la opinión pública y encarcelado en Lecumberri. Luego de siete años de prisión fue liberado, en 1977’’, explicó Cristina.

Señaló que su padre se reincorporó a la lucha armada; a finales de 1980 lo hirieron durante un enfrentamiento con fuerzas federales en Michoacán, y lo llevaron al penal de Apatzingán. En 1984 fue liberado. ‘‘En los años siguientes se incorporó a la lucha campesina de Zirahuén, junto con Efrén Caíz, en contra de la privatización de las tierras y la tala ilegal. Fue cofundador de la organización de derechos humanos Diego Lucero, que denunció desapariciones forzadas con motivos políticos’’, apuntó.

En Chilpancingo, Guerrero, familiares de Gudelia y Joela Adame García, de 60 y 55 años de edad, respectivamente, denunciaron ayer que las hermanas desaparecieron la mañana del pasado viernes. al salir de su casa.

En rueda de prensa, pidieron ayuda a los ciudadanos. ‘‘Son amas de casa, ya jubiladas, que se dedicaban al hogar’’.

En Jalisco, colectivos y estudiantes realizaron ayer una jornada política y cultural contra las desapariciones, delito en el cual la entidad ocupa el tercer lugar nacional.

Cientos de personas participaron en foros, exposiciones de pintura y fotografía a un costado de rectoría de la Universidad de Guadalajara, en la capital del estado.

(Ernesto Martínez, Sergio Ocampo y Juan Carlos G.. Partida)