Washington

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, intensificó este lunes su crítica al fiscal especial Robert Mueller, al señalar que él y su equipo disfrutan de arruinar la vida de la gente y buscan tener un efecto en las próximas elecciones, al tiempo que más de 175 ex miembros del Departamento de Estado y del Pentágono se sumaron a una declaración firmada por funcionarios que critican la decisión del magnate de cancelar una credencial de seguridad al ex director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) John Brennan.

La nueva andanada de tuits del mandatario se desencadenó después de que el New York Times reportó en primera plana que el abogado de la Casa Blanca Don McGahn ha estado cooperando ampliamente con el equipo del fiscal Mueller, quien investiga la injerencia de Rusia en la elección del 2016 y una posible colusión con la campaña de Trump.

Tras la artillería del fin de semana en Twitter, el magnate calificó este lunes a Mueller de deshonrado y desacreditado.

Cualquier persona que necesita tanto tiempo, cuando ellos saben que no hubo conspiración rusa, es alguien que está buscando problemas, dijo el presidente. ¡Ellos disfrutan de arruinar la vida de la gente y rehúsan ver la verdadera corrupción del lado demócrata; las mentiras, los despidos, los mensajes electrónicos borrados y mucho más.

El equipo legal original de Trump había alentado a McGahn y otros funcionarios de la Casa Blanca a cooperar con Mueller, y éste pasó horas en entrevistas.

Trump invitó, por otra parte, a unos 150 agentes de inmigración y de protección de fronteras a la Casa Blanca. Protegeremos a aquellos que nos cuidan a nosotros, manifestó el mandatario, que calificó de héroes y grandes patriotas a los agentes de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), así como a los de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.

Su respaldo al ICE llega después de que esta agencia fue cuestionada por destacados demócratas como parte de la indignación que causó la separación de familias inmigrantes en la frontera con México.

Más de 175 ex funcionarios se sumaron al texto firmado inicialmente la semana pasada por 15 ex directores y ex subdirectores de la CIA y de la oficina del director de inteligencia nacional, e incluyen cargos políticos y funcionarios públicos de carrera que trabajaron al mando de presidentes demócratas y republicanos.

Entre los más destacados en adherirse a la declaración figuran John Bellinger, ex abogado del Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad Nacional, y los ex subsecretarios de Estado Nicholas Burns, Wendy Sherman y Thomas Pickering.

En tanto, Trump admitió ayer estar preocupado por la posibilidad de que cualquier declaración bajo juramento que brinde al fiscal Mueller se use para presentar cargos de perjurio en su contra, como parte de la indagatoria sobre la injerencia rusa. Esta es una inquietud que comparte con su abogado particular, Rudolph Giuliani.

El gobernante republicano expresó su temor de que los investigadores pudieran comparar sus declaraciones con las de otros que han testificado, como el ex director de la FBI James Comey, y que cualquier discrepancia sea utilizada en su contra.