Cuernavaca, Mor.

El próximo secretario de Seguridad Pública federal, Alfonso Durazo Montaño, encabezó este martes el primer foro temático Políticas de drogas y pacificación, durante el cual aseguró que el narcotráfico amenaza nuestra seguridad y destroza nuestro entramado social, y ensombrece el ánimo nacional, pero sobre todo cada día cobra más víctimas.

Ese foro temático, a diferencia de los regionales –a los cuales complementará junto con otras mesas de diálogo posteriores–, no fue abierto a la sociedad ni a víctimas de la violencia, sino que en él participaron unos 50 expertos nacionales e internacionales en temas de estupefacientes. Las propuestas que surjan del acto, dijo Durazo Montaño, se analizarán sistemática e integralmente para contribuir a trazar la ruta de la pacificación y reconciliación del país, además que se tomarán en cuenta para definir las políticas públicas del próximo gobierno federal que encabezará Andrés Manuel López Obrador.

Antes de ingresar al foro, Alfonso Durazo dijo en entrevista colectiva que para el futuro gobierno no será una prioridad el mando único, fundamentalmente porque invade las atribuciones de los alcaldes en materia de seguridad; sin embargo, si eventualmente los alcaldes fueran anuentes a una propuesta de esta naturaleza, pues estaría ya en sus ámbito de su responsabilidad decidirlo.

Sobre el foro realizado, acotó que es natural comenzar con el doloroso Viacrucis de las políticas contra las drogas que hemos padecido, y que hemos seguido por inercia como una condena del destino y sin esperanza de solución. Desde que tenemos memoria los aquí presentes, nuestros gobiernos han librado una lucha contra las drogas, un combate que cada vez es más violento, amplio y diversificado, pues el narcotráfico amenaza nuestra seguridad, destroza nuestro entramado social y ensombrece el ánimo nacional, pero sobre todo, cada día cobra más víctimas.

Adelantó que en el primer foro se buscarán identificar los aspectos que tienen mayor interrelación con la pacificación de México, como los casos de campesinos que siembran droga y los sectores que sufren sus consecuencias, concluiremos abordando los aspectos socioeconómicos y el desarrollo alternativo y de salud y prevención para este problema. Durazo Montaño consideró que el problema de la drogadicción debe verse bajo la óptica de una enfermedad social que debe enfrentarse bajo criterios de salud pública.