Tumbes., Miles de venezolanos exhaustos, deshidratados y mal alimentados aceleraron ayer su paso a través de Colombia y Ecuador para ingresar a Perú antes de que entren en vigor –este sábado– nuevas y más restrictivas normas migratorias ordenadas por Lima.

En un Centro Binacional de Atención Fronteriza ubicado en el límite entre Ecuador y Perú, en la norteña localidad de Tumbes, miles de venezolanos, la mayoría jóvenes y algunos con hijos, llegaron a la zona en horas previas a que comience a regir la obligación de que presenten su pasaporte para entrar a territorio peruano.

Muchos de ellos llevaban casi 20 días viajando a pie, en precarios autobuses rurales o pidiendo cola, como llaman a solicitar aventón, tras dejar el país petrolero, que está sumido en una aguda crisis económica y con una hiperinflación que alcanza un millón porcentual.

Pero la llegada masiva de venezolanos al noroeste de Perú, limítrofe con Ecuador, superó las capacidades del paso fronterizo cercano a Aguas Verdes. Éste, que solía atender unos 200 viajeros al día, está ahora casi colapsado, con el ingreso diario de más de 2 mil 500 migrantes.

Ecuador anunció que suspenderá el pedido de pasaporte a los migrantes venezolanos para llegar a su territorio y abrió un corredor humanitario para facilitar el traslado en autobuses de cientos de solicitantes de asilo.

Quito también habilitó un servicio de transporte gratuito para los venezolanos que vienen de Colombia y pretenden llegar a Perú. Van 35 autobuses en este momento por el corredor humanitario y vamos a seguir hasta que se pueda, declaró a la prensa el ministro de Interior, Mauro Toscanini.

La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados mantiene personal desde abril en esta frontera para ayudar a los migrantes venezolanos, que de acuerdo con el organismo eligen España como el principal destino de los que migran a Europa y 39 por ciento del total de los solicitantes de asilo a Madrid proceden de Venezuela, seguidos de Honduras y Siria.

La Organización Internacional para las Migraciones advirtió sobre un agravamiento del fenómeno venezolano. Se está creando una crisis como las que hemos vivido en otras regiones del mundo, comparable con la de los refugiados en el Mediterráneo, denunció en Ginebra su portavoz, Joel Millman.

Naciones Unidas estima que 2.3 millones de venezolanos han emigrado desde 2014, cuando el país con la mayor reserva probada de petróleo del mundo cayó en una crisis económica, considerada peor que la Gran Depresión de 1929, lo que derivó en la mayor migración en Sudamérica de los últimos años.

La mayoría de los migrantes venezolanos salen por tierra a través de Colombia, país al que arribaron más de un millón en los pasados dos años.

Ecuador afirmó que al menos 200 mil ya están viviendo en su territorio, mientras en Perú la cifra aumentó a más de 400 mil.