Miércoles 5 de septiembre de 2018, p. 33
Estudiantes de más de 40 planteles de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) decidieron continuar o iniciar paros de actividades por 48 horas o más para exigir la desaparición de los grupos porriles, cuya creación atribuyeron a la dirección de los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH), así como a la dirección de Auxilio UNAM. De hecho, iniciaron una campaña para señalar y denunciar a los golpeadores.
Luego de que el lunes presuntos porros agredieron una manifestación pacífica de estudiantes del CCH Azcapotzalco –que demandaban mayor seguridad y mejores condiciones académicas–, cerca de la Rectoría, desde el mediodía del martes comenzaron a realizarse asambleas en casi todas las facultades de Ciudad Universitaria, los planteles de bachillerato y las escuelas ubicadas en otros puntos de la capital.
Tras las reuniones de debate, alumnos de diversos planteles se reunieron en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y marcharon hacia la Rectoría, en medio de consignas como “fuera porros de la UNAM” y “no somos porros, somos estudiantes”.
Aunque inicialmente los jóvenes realizaron un mitin frente a las puertas de Rectoría –que ya estaban cerradas cuando llegaron–, unos minutos más tarde decidieron trasladar la actividad a la zona conocida como Las Islas, frente a la Biblioteca Central.
Ahí exigieron la desaparición de los grupos porriles en planteles universitarios y señalaron que su creación ha sido auspiciada desde hace muchos años por las propias autoridades de la UNAM
.
Uno de los personajes involucrados en ello, aseguraron en el mitin, es el coordinador del grupo de seguridad Auxilio UNAM, Teófilo Licona –conocido como El Cobra–, quien aparece en videos de la agresión del pasado lunes, aparentemente dialogando con los agresores.
Una estudiante de CCH Azcapotzalco que prefirió reservar su identidad, aseguró a La Jornada que en dicho plantel es evidente
la relación entre los grupos porriles y los directivos de la escuela, algunos de los cuales incluso los saludan de abrazo
y los protegen.
La presencia de golpeadores en el CCH, dijo, busca amedrentar a los alumnos que se movilizaron para exigir la renuncia de la directora del plantel, María Guadalupe Márquez Cárdenas, quien el pasado jueves dejó el cargo, luego de protestas por irregularidades, como falta de maestros asignados, clima de inseguridad y la destrucción de murales pintados por alumnos.
Estudiantes de las facultades de Estudios Superiores (FES) Acatlán, Aragón, Iztacala y Cuautitlán campos 1 y 4, así como del CCH Naucalpan se sumaron al paro de labores en solidaridad con los agredidos.
Después de las 13 horas de ayer, grupos de esas instituciones educativas acordaron, por mayoría de votos, suspender actividades y redactar demandas particulares en cada escuela.
Por la mañana, estudiantes del CCH Naucalpan suspendieron actividades, pero alumnos y jóvenes embozados, tomaron el plantel y colocaron cadenas y candados en las puertas, reportó la corresponsalía de La Jornada.
En otras sedes se acordó parar actividades para exigir la desaparición de los grupos de golpeadores.
Se trata de 40 dependencias, tanto de Ciudad Universitaria como de otros puntos de la ciudad. La mayoría cerrará por 48 horas, a partir de hoy.
La Facultad de Ciencias Políticas, FES Acatlán y la Unidad de Posgrado lo harán por 72 horas. Otros decidieron efectuarlos indefinidamente o hasta el 7 o 10 de septiembre, entre ellos la Escuela Nacional de Trabajo Social y los CCH Naucalpan y Oriente. A ello se solidarizaron la Escuela Nacional de Antropología e Historia y la Universidad Pedagógica Nacional. Otros de los resolutivos estudiantiles fueron realizar una marcha hoy a las 13 horas de Ciencias Políticas a Rectoría, y celebrar una asamblea general el viernes en la Facultad de Economía.