El duelo amistoso del martes entre México y Estados Unidos no estará devaluado pese a que ambos equipos llegarán con integrantes juveniles y sin estrellas internacionales por el cambio generacional que viven, aseguró el técnico estadunidense Dave Sarachan.

Los partidos de Estados Unidos contra México siempre serán de alto perfil, no importa cómo lleguen los equipos, cada uno de los jugadores tiene su propia historia, tanto como futbolistas como culturalmente, los enfrentaremos como en cualquier otro juego en el que hemos sido rivales, aseveró.

Sostuvo que la juventud de los jugadores no cambiará la intensidad del duelo, debido que ya han sido adversarios en encuentros de selecciones juveniles y saben lo trascendental que es el llamado clásico de Concacaf.

Muchos de estos jugadores se han enfrentado en selecciones menores y saben lo que es jugar con pasión, por lo que tienen una idea de lo que significa que estas dos selección se midan en la cancha, y lo confirmarán a la hora del juego, dijo.

Afirmó que la derrota 2-0 que sufrieron el viernes ante Brasil no golpeó el estado anímico de su escuadra. El equipo no perdió confianza. Conocemos el potencial del rival que enfrentamos, es cinco veces campeón del mundo, y aprendimos la lección, expresó.

Dave Sarachan fue elegido como timonel interino para dirigir al conjunto de las barras y las estrellas en esta fecha FIFA. Por supuesto que me gustaría mantenerme en todo el proceso hasta Qatar 2022, las posibilidades son indeterminables, pero ahora estoy concentrado en estos dos encuentros.

El mediocampista Cristian Roldán, indicó que la poca experiencia de los futbolistas con sus selecciones no tendrá repercusiones en la calidad del juego.

Es algo diferente, ya no están los jugadores de antes, pero sigue siendo un clásico, porque nos conocemos desde selecciones menores. La energía va a estar ahí, los dos equipos queremos demostrar que estamos para grandes cosas, apuntó.

En tanto, el Tricolor tuvo que cambiar su planes debido a la intensa lluvia que cayó en Nashville, que lo obligó a trabajar en la mañana en el hotel donde se hospedan y sólo realizar una práctica vespertina, sin dar declaraciones.

La escuadra dirigida por Ricardo Tuca Ferretti había considerado un entrenamiento matutino a puerta cerrada en la cancha de la Universidad de Vanderbilt, que se encuentra cerca del hotel donde se concentra, pero debido a las inclemencias del clima realizaron los ejercicios bajo techo.