Culiacán, SIN., En multitudinaria rueda de prensa, el ex crack argentino Diego Armando Maradona fue presentado como nuevo timonel del equipo Dorados. Serio y con hablar pausado, El Pelusa prometió trabajo, enfatizó que no llega de vacaciones y buscó dejar atrás las polémicas. Perdí mucho tiempo haciendo cosas feas. Hoy me quiero levantar todos los días trabajando para Dorados.

Junto a los directivos José Antonio Núñez y Juan Pablo Santiago, Maradona les agradeció por pensar en mí. Enseguida habló con el corazón: Yo tuve un montón de trasteo en mi vida. Me estaba yendo para abajo, yo me estaba consumiendo, por ahí decían el dopaje, el dopaje me quedé sin una moneda, no me importa decirlo. ¿Qué pasó?, se cortó todo eso gracias a mis hijas.

El astro aseguró que el presidente de Bolivia, Evo Morales, le ofreció dirigir a su selección. “Maduro (mandatario de Venezuela) también me pidió ser timonel de su escuadra nacional. A futuro tendré que decir sí a uno de los dos.

“Volví al trabajo, asumo esta responsabilidad –la dirección técnica– como quien tiene un hijo en sus brazos. Yo quiero decir, explicar, que cuando tomaba era para atrás, era un paso atrás; y lo que tiene que hacer el jugador de futbol es ir para adelante”. Explicó que lo hizo recapacitar su hija menor, la de cuatro años, porque decía que había vivido cosas con Dalma (otra de sus hijas), pero con ella no. Cuando estuve en coma, ella me tocaba así la sábana para que me despertara.

Diego está en paz con su pasado. Después salí (del coma). Todos creemos tener la palabra de la verdad, todos somos juzgados, pero ¿cuánta gente hay acá que hace peores cosas y no sale en ningún diario? Aseguró que emocionalmente se siente bien, “en el mejor momento de mi vida. Mis hijos están bien, sólo tengo alguna que otra peleíta con una ex mujer.

“Pero quiero dar a Dorados lo que me perdí cuando yo estaba enfermo –habré estado así unos 14 años–, bueno, hoy quiero ver el Sol, quiero acostarme de noche. Antes no lo hacía, no sabía lo que era una almohada”, indicó acerca de su vida disipada.

En cuanto al equipo, prometió trabajo. Los partidos los ganamos adentro de la cancha y con el sacrificio de los jugadores durante toda la semana. Diego, además, solicitó el apoyo de la afición: “necesitamos que la gente esté con nosotros. Si están con nosotros, más lo que yo le puedo inyectar a los jugadores anímicamente, entonces va a ser bravo.

Yo no me escondo, vamos a trabajar, pero también ustedes sepan que a nosotros nos toca llevar un elefante al hombro, que no es poco. Insistente, resaltó que el compromiso es ascender al equipo, que ayer realizó su primer entrenamiento ante 2 mil aficionados, ya con el argentino.

El Pelusa, quien llega con Luis Alberto Islas como auxiliar, no ocultó su deseo de ver progresar al balompié local. “No vengo a resolver el futbol mexicano, vengo a dar una mano a Dorados y que Dorados me la dé a mí. Muchas veces me dijiste, ¿por qué vos hablaste de México?, yo quiero que el Tri haga partidos importantes, que se codee con Alemania, Holanda, con Bélgica, ¡pero sigue jugando mal!, con El Salvador, lo digo con el respeto que le tengo a El Salvador.

Si vos te fijás, últimamente hay un montón de jugadores mexicanos, si esto hubiese ocurrido 20 años atrás, ¿hoy qué sería México?, ¡potencia!, sí señor, porque el partido que México gana a Alemania es un señor juego, ¡eso es futbol!, explicó.

Al tanto de las críticas que genera, indicó: a mí no me gusta defenderme, agradezco con toda el alma a los que me quieren, y a los que no, les agradezco que hayan venido a escucharme. Al periodista que quiera hacer problema, lo invito a que venga a entrenar con nosotros.