Los fantasmas del pasado siempre regresan y la memoria es lo único que nos puede asir al mundo real, expresó el crítico de cine Rafael Aviña, quien prepara el libro No queremos Olimpiadas, queremos revolución, en el cual aborda la relación entre el séptimo arte y el movimiento estudiantil de 1968 y recupera momentos de su infancia en esa convulsa década del siglo XX.

Ayer, durante su participación en Diálogos: una radiografía fílmica del 68, que se realizó en la Cineteca Nacional, el autor sostuvo: “Aunque la violencia siempre estuvo latente en esa época, nunca se esperó que el Estado la utilizara de manera tan fuerte. Sucedió que los Juegos Olímpicos iban a iniciar el 12 de octubre, y por eso Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría no podían dejar crecer más la situación y arremetieron contra (los estudiantes en) la Plaza de las Tres Culturas. Nadie lo esperaba, lo cual se corrobora en el documental El grito, donde se observa a niños, amas de casa, obreros y trabajadores” en el mitin de Tlatelolco.

También es cierto, dijo, que “hay una obsesión de los cineastas por remitirse a El grito, película seminal, ya que no se puede concebir nada de ficción o documental sin referirse a este trabajo”.

En su reciente obra, Aviña recurre la memoria y divide el contenido en dos partes: La primera es una crónica de mi infancia, en esa década de 1960, donde relato la cotidianidad del México de entonces, pero con la mirada de un niño de ocho años; además, recurro a una especie de diario donde anotaba algunas cosas, las cuales amplié para esta sección.

Una segunda parte consiste en la investigación más completa sobre lo relacionado con la cinematografía que existe en torno al 68, desde cortos, medios y largometrajes de ficción y documentales.

También “se retoman películas que, aunque no están dedicadas al movimiento estudiantil, tienen referencias a él, como El bulto (Gabriel Retes) o Canoa (Felipe Cazals). Ésta, sin ser una cinta que busque abordar este tema, presenta una metáfora brutal sobre lo que pasó en la Plaza de las Tres Culturas”.

Rafael Aviña, autor de los libros Asesinos seriales y El placer criminal: crónicas del infierno, estuvo acompañado por el periodista Alan Rodríguez y habló sobre su fascinación por la nota roja, la violencia pasada y actual, el movimiento estudiantil y la memoria combativa que permanece vigente gracias a las imágenes del cine.

Diálogos: una radiografía fílmica del 68 es un ciclo de charlas organizado por la Red de Prensa Mexicana de Cine y el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine). Continuará los lunes 17 y 24 de septiembre con Carlos Mendoza, director de Canal Seis de Julio, y con la realizadora Marcela Fernández Violante, en ese orden, en la sala 4 de la Cineteca Nacional (avenida México Coyoacán 389, Xoco).