San Salvador Atenco, Méx., Campesinos de los núcleos ejidales de Acuexcomac, municipio de San Salvador Atenco, reanudaron sus guardias para impedir que pasen por sus tierras los camiones que llevan materiales para la construcción de la autopista Pirámides-Texcoco, que forma parte de la infraestructura del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), después de que el martes fueron desalojados por un grupo de golpeadores armados.

Autoridades municipales y estatales se comprometieron a realizar patrullajes diarios para evitar que los comuneros vuelvan a ser agredidosç La noche del martes comenzaron a dialogar con los manifestantes, tras nueve horas de bloqueos en protesta por la agresión.

En la reunión entre autoridades y ejidatarios no estuvieron representantes de Pinfra, concesionaria de la construcción de dicha autopista y a la cual se acusa de enviar a los golpeadores junto con el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México.

Los comuneros exigieron respeto sus ejidos y explicaron que Acuexcomac no ha aprobado en asamblea los trabajos de dicha empresa ni la venta de los caminos ejidales, pero Pinfra pretende ‘‘apropiarse de los terrenos por la fuerza’’; por eso continúan en plantón.

‘‘Pinfra mete golpeadores y se adueña de terrenos. Ya lo hizo en el ejido de Tequisistlán. Se tiene que poner alto a sus agresiones’’, dijo Heriberto Salas, uno de los ejidatarios de Nexquipayac, quien participó en la mesa de negociación.

Destacó que Pinfra ha roto tuberías de los sistemas de riego en Nexquipayac. ‘‘Aquí quieren hacer puentes y un camino sin autorización. No han presentado los planes arquitectónicos’’, denunció.

Vecinos de Acuexcomac acusaron al empresario minero René Martínez Moncayo y a Carlos Soria, del sindicato Zapatistas, de encabezar a los golpeadores, pues participan en las obras.

Por su parte, el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco sostuvo que quienes quieren imponer el NAICM y afectar la vida comunitaria son el presidente Enrique Peña Nieto, Grupo Carso y el Grupo Atlacomulco.

En Naucalpan, estado de México, vecinos de cinco fraccionamientos rechazaron el proyecto de conexión de la autopista Naucalpan-Ecatepec con el bulevar Manuel Ávila Camacho, parte de los trabajos del NAICM. Exigieron no afectar sus comunidades y evitar que la vía pase por zonas habitacionales.

Señalaron que no quieren tránsito masivo en sus comunidades y que la obra contraviene el proyecto original de urbanización y uso de suelo de la zona, donde además hay una grieta subterránea que obliga a imponer restricciones de peso y altura en las construcciones.