El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, alertó del peligro y riesgo extremo para los centroamericanos que intentan pasar a Estados Unidos, cuyo gobierno ha advertido una reacción hostil. Por ello, los exhortó a no cruzar la línea fronteriza y regularizar su estancia en México, si así lo desean.

Vemos con mucha preocupación que pueda ocurrir un incidente en la línea fronteriza que termine con daño a la población vulnerable, dijo.

Si bien miles de migrantes se dirigen al norte, 2 mil 600 optaron por permanecer en el país y solicitar refugio, mientras mil 500 pidieron repatriación.

Desde el 19 de octubre pasado, 3 mil 800 pidieron asilo; algunos se desistieron del procedimiento y retornaron a sus naciones, informó.

Los peticionarios de apoyo podrán tener una clave de identificación personal y, con ella, acceso a servicios de salud, educativos y la posibilidad de obtener un empleo, en tanto se resuelve su situación migratoria.

En conferencia de prensa, junto con el titular de la Secretaría del Trabajo, Roberto Campa, y el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, anunció la operación de ferias de empleo –la primera empezó ayer en Guadalajara– para ofrecer entre 7 mil y 10 mil plazas formales con seguridad social, principalmente en las maquiladoras de productos de exportación, tanto a mexicanos como a centroamericanos que inicien aquí su regularización migratoria.

Lo anterior es adicional al programa Esta es tu casa, anunciado por el presidente Enrique Peña Nieto el mes pasado, al que se han acogido 550 migrantes, así como mil 800 chiapanecos.

El Estado, subrayó, ha brindado atención humanitaria para evitar decesos. En este contexto se han atendido tres brotes de enfermedades: sarampión, dengue y piojos, y se aplica vigilancia en materia de seguridad para detectar a quienes tengan ficha roja internacional. En este último punto, señaló que entre los indocumentados sí hay casos de actitudes atípicas, pero evitó generalizar o criminalizar la marcha.

Mientras, en Tijuana, Baja California, adonde se dirige la mayoría de los centroamericanos, se ha establecido un grupo gubernamental para habilitar un albergue y una zona de seguridad humanitaria, con servicios de salud.

Si bien el principal foco de atención se ubica en aquella entidad, los centroamericanos se ubican además en Ciudad de México, Querétaro, Guanajuato, Jalisco, Nayarit, Sinaloa y Sonora.

Ante los riesgos de cruzar a Estados Unidos pidió a la prensa difundir el mensaje de que esta acción es peligrosa. “A esta población no le conviene cruzar.

Nosotros acompañamos a funcionarios de la embajada de Estados Unidos para que dijera a los integrantes de esta primera caravana que en la condición en que estaban caminando por México no tendrían expectativa alguna de ingresar a esa nación, informó.