Managua. La principal alianza opositora de Nicaragua manifestó este jueves su disposición de restablecer el diálogo con el gobierno de Daniel Ortega, suspendido desde junio, para buscar una solución a la crisis política y económica que enfrenta el país desde abril.

La alianza está dispuesta a retornar a la mesa de diálogo para superar el conflicto y la crisis por la vía pacífica, anunció un representante de la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco, Carlos Tünnermann, en rueda de prensa.

La oposición hizo el llamado previo a la protesta que se proponen reanudar este domingo en Managua para exigir la liberación de cientos de manifestantes presos, tras pasar más de un mes fuera de las calles por la represión.

La oposición mantiene su convocatoria a la movilización, a pesar de que la policía no ha respondido a la autorización solicitada el miércoles.

La vicepresidenta y vocera del gobierno, Rosario Murillo, dijo que los nicaragüenses tienen derecho a vivir en paz y omitió referirse a la solicitud opositora.

En mayo la Iglesia católica intentó mediar en un diálogo entre el gobierno y la oposición para buscar una salida a la crisis, pero un mes después se estancó debido a la negativa del Ejecutivo de detener la represión y negociar la democratización del país.

Las protestas iniciaron el 18 de abril contra una fallida reforma al seguro social, que luego se trasformó en una demanda de salida de Ortega, en el poder desde 2007.

Según grupos humanitarios la violencia ha dejado más de 320 muertos y 600 detenidos, mientras el gobierno reconoce 199 víctimas y 273 presos a los que acusa de golpistas y terroristas.

Tras siete meses de crisis, que han provocado la migración de miles de nicaragüenses y la pérdida de más de 400 mil empleos por la caída de la economía, la oposición reiteró que es necesario superar el conflicto por la vía pacífica.

Este mes el gobierno anunció que promoverá una ley para la reconciliación.