Tijuana, BC., A cuentagotas el gobierno de Estados Unidos atiende las solicitudes de asilo de migrantes en la garita internacional de San Ysidro, California, lo que genera una gran aglomeración de centroamericanos en los albergues instalados en Tijuana, al que también acuden mexicanos desplazados de su lugar de origen por la violencia.

Son miles quienes esperan ser atendidos, pero las autoridades migratorias estadunidenses atienden por este puerto fronterizo limítrofe con Tijuana a un promedio de 40 personas diarias que piden protección humanitaria.

Ante la falta de un censo oficial, los gobiernos locales desconocen las cifras de migrantes mexicanos y extranjeros que han sido aceptados para iniciar su trámite en Estados Unidos. Hasta el momento, parte de los integrantes de la Caminata Migrante se encuentran en el albergue instalado en el centro de baile y espectáculos El Barretal, ubicado en la colonia Mariano Matamoros de Tijuana, en la cual hay una alta incidencia delictiva.

El refugio es administrado por el Instituto Nacional de Migración y tenía registrados hasta la mañana de este lunes a 2 mil 122 centroamericanos, de los cuales 384 son menores de edad, 376 mujeres y mil 362 varones. Todos esperan su turno entre los solicitantes para ingresar a la garita internacional, según el Consejo Estatal de Atención al Migrante.

El viernes pasado la Secretaría de Salud estatal clausuró el refugio temporal de la unidad Benito Juárez, ubicado en la zona norte de Tijuana, que llegó a albergar a 7 mil migrantes, con el argumento de que la insalubridad prevalecía por el hacinamiento y la lluvia que cayó en días previos.

Las autoridades estiman que afuera de esas instalaciones pernoctan alrededor de mil 400 centroamericanos que se han resistido a trasladarse a El Barretal.