Martes 19 de febrero de 2019, p. 23
Londres. Siete legisladores del Partido Laborista británico anunciaron su renuncia este lunes a la principal fuerza de oposición en Reino Unido, por su desacuerdo con la gestión del líder Jeremy Corbyn sobre el Brexit y las reiteradas acusaciones de presuntos comportamientos antisemitas.
Las dimisiones evidenciaron una ruptura entre socialistas y centristas dentro del Partido Laborista, el principal representante de la clase trabajadora de Gran Bretaña, y en el que varios de sus legisladores están insatisfechos con el liderazgo de Corbyn, quien asumió el mando en 2015.
Los renunciantes, con experiencia legislativa de entre nueve y 27 años, son una pequeña fracción de los 256 representantes laboristas, y de los 650 miembros del Parlamento; no obstante, esta es la mayor escisión de la oposición desde que cuatro miembros dimitieron en 1981 para formar el Partido Socialdemócrata.
Luciana Berger, legisladora de Liverpool, de origen judío, criticó en conferencia de prensa que ofreció con seis colegas, que su partido se volvió institucionalmente antisemita
, y anunció que los renunciantes continuarán en la Cámara de los Comunes como parte del recién formado Grupo Independiente.
En el grupo está Chuka Umunna, legislador que encabeza la campaña en favor de un segundo referendo para detener el Brexit.
Corbyn tuiteó una escueta respuesta en la cual eludió el tema del presunto antisemitismo. Me decepciona que estos parlamentarios se hayan sentido incapaces de seguir trabajando juntos por las políticas laborales que inspiraron a millones en las pasadas elecciones e impulsaron el mayor incremento de nuestro voto desde 1945
.
El Partido Laborista se encuentra dividido por los señalamientos de representar una débil oposición ante los planes de la conservadora primera ministra, Theresa May, contra la salida de Reino Unido de la Unión Europea, y por no lograr terminar con el presunto antisemitismo dentro de sus filas.