Golpe a acuerdo para el Brexit
El presidente de la Cámara de los Comunes asegura que las reglas al respecto son claras desde hace siglos
Martes 19 de marzo de 2019, p. 25
Londres. John Bercow, presidente de la Cámara de los Comunes, asestó este lunes un golpe potencialmente letal al acuerdo para el Brexit de la primera ministra británica, Theresa May, al señalar que el gobierno no puede seguir pididendo a los legisladores que voten la misma propuesta que ya fue rechazada en dos ocasiones.
El gobierno pretende realizar un tercer intento para que los legisladores respalden el acuerdo, de preferencia antes de que May viaje el jueves a Bruselas para una cumbre de la Unión Europea (UE), donde está programado que le solicite al bloque que postergue la salida de Gran Bretaña. May ha advertido a los opositores que no aprobar el acuerdo podría representar una demora prolongada e incluso indefinida del Brexit.
Bercow criticó el plan de May, y señaló que reglas parlamentarias de hace siglos evitan que la misma propuesta, o básicamente la misma
, sea puesta a votación repetidas veces en la misma sesión del Parlamento.
Dijo que una nueva moción tendría que ser fundamentalmente distinta. No en cuestión de redacción, sino de sustancia
.
Esta declaratoria causó indignación entre los simpatizantes del gobierno en la Cámara de los Comunes. El procurador general, Robert Buckland, dijo que Gran Bretaña enfrenta una importante crisis constitucional
.
Como intérprete y ejecutor de las reglas del Parlamento, el presidente parlamentario tiene enorme autoridad. Bercow –cuyos estruendosos gritos de ¡Orden!
lo han convertido en celebridad internacional– a menudo ha utilizado su cargo para influenciar a legisladores específicos, ante la molestia del gobierno.
Parte de la responsabilidad del presidente es hablar con la verdad ante la autoridad
, sostuvo.
Incluso antes del fallo de Bercow, May enfrentaba un panorama adverso en su intento por revertir los enormes márgenes de derrota que ha sufrido. En enero fue rechazado por 230 votos y la semana pasada por 149.
La oposición al acuerdo de May se centra en una medida designada para garantizar que no exista una frontera dura entre Irlanda del Norte, perteneciente a Reino Unido, e Irlanda, miembro de la Unión Europea, una vez que se concrete el divorcio de la UE.