En la temporada de calor se registra una mayor carencia de agua en el oriente y el sur de la Ciudad de México, debido a que se dejan de recibir mil litros por segundo del sistema Lerma, además de un incremento en el consumo del líquido hasta de 2 mil litros por segundo en el poniente de la capital, señaló la jefa de Gobierno local, Claudia Sheinbaum Pardo.

En conferencia de prensa, explicó que este mayor consumo en alcaldías como Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo se debe principalmente al riego de jardines privados, lavado de autos y limpieza de banquetas, agua que podría llegar a las zonas donde hay escasez.

Por este motivo, el gobierno capitalino inicia a partir de hoy (ayer) una campaña en redes sociales, medios de comunicación y visitas domiciliarias denominada No la riegues, para exhortar a los ciudadanos a evitar su desperdicio.

Estamos convencidos de que si apelamos a la conciencia de la población vamos a tener mayor agua en el oriente y en el sur de la ciudad, expresó la titular del Ejecutivo local, quien recordó que en la pasada emergencia que se vivió en la ciudad por los trabajos de mantenimiento del sistema Cutzamala, la población participó de manera activa para disminuir su consumo.

Sheinbaum Pardo estuvo acompañada del director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Rafael Carmona Paredes, quien explicó que de febrero a mayo parte del agua que llega del Lerma se utiliza para labores de riego, lo que implica una disminución en la aportación del líquido de ese sistema hacia la capital.

Al señalar que el suministro satisfactorio por habitante es de 150 litros diarios, dijo que además en las demarcaciones territoriales de Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo el consumo del líquido en la época de secas rebasa los 300 litros, mientras en la zona oriente el promedio es de 120 litros por día.

Lo anterior, subrayó el funcionario, provoca que jurisdicciones como Azcapotzalco, Benito Juárez, Cuauhtémoc, Iztapalapa y Tlalpan reciban menos agua en esta época del año, por lo que es necesario racionalizar el agua potable, especialmente en usos que no son tan indispensables para la vida humana, la alimentación y la salubridad.

Con el lema No la riegues la campaña se extenderá hasta mayo de este año y tiene como meta un ahorro de 2 mil litros por segundo diarios y no se prevé establecer sanciones a quien se sorprenda desperdiciando el agua más allá de las que están marcadas en la Ley de Cultura Cívica de la ciudad, precisó la jefa de Gobierno.

Señaló que otra de las acciones para mejorar el suministro es la atención de fugas, para lo cual se dispone de 75 brigadas encargadas de detectar éstas y se prevé duplicar ese número a principios de mayo próximo.

Añadió que se trabaja en un proceso de sectorización y control de presión y medición con el propósito de facilitar la identificación y control de las fugas, antes de entrar a un cambio masivo de tuberías, pues en los pasados 20 años esa estrategia no ha disminuido de manera sustantiva el problema.

La meta de la administración es que todos tengan agua todos los días; no sabemos si las 24 horas, pero sí todos los días y disminuir la sobrexplotación del acuífero en el oriente, expresó Claudia Sheinbaum.