Como mujeres, nos enseñan que primero somos hijas, esposas, madres y abuelas, pero nunca a querernos ni a pensar en nosotras, afirma Angelita, quien hace más de dos décadas fue diagnosticada con VIH. Su voz y su historia forman parte del documental Debajo de los laureles, relatos de mujeres con VIH, que elaboró la organización AIDS Healthcare Foundation (AHF)-México.

De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el VIH aún es uno de los principales problemas de salud en el orbe. Se estima que 36.7 millones viven con el virus y cada año hay 1.8 millones de nuevos contagios. Sin embargo, ser portador del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ya no es una sentencia de muerte. Con los medicamentos adecuados (retrovirales) y una dieta sana se puede llevar una vida normal. Ser plena y feliz, afirma Angelita.

ONU Mujeres destaca que, a escala mundial, se detectaron 17.8 millones de mujeres de 15 años y más con VIH, lo que equivale a 51 por ciento del total de la población adulta contagiada. Agrega que las jóvenes y adolescentes de 15 a 24 años se ven particularmente afectadas por la infección, pues hay 2.3 millones que padecen VIH, lo que representa 60 por ciento del total de la población de 15 a 24 años con este mal.

Cada vez más adolescentes

Lilia, madre y mujer con VIH, quien también cuenta su historia en el documental, señala que cada vez es más común ver en los grupos de apoyo de mujeres con VIH a adolescentes que se contagiaron en sus primeras relaciones sexuales, por lo que destacó la importancia de generar la cultura del cuidado de nuestro cuerpo y exigir el condón en todos nuestros encuentros íntimos.

A pesar de que, como afirma Angelita, muchas de mujeres con VIH tenemos historias distintas, en su mayoría comparten el principio de la enfermedad, pues el contagio se produjo con parejas permanentes.

Cuando sales a la calle a invitar a mujeres para que se hagan una prueba de detección rápida del virus, que puede salvar su vida, con frecuencia responden que ellas sí son fieles a sus compañeros, aunque ellos no. Tenemos que querernos nosotras y pensar que así como nos hacemos pruebas para detectar si tenemos diabetes, también debemos hacernos una prueba de VIH, sin estigmas ni complejos.

Lupita, madre de cuatro hijos, con nueve nietos y una bisnieta, vive desde hace más de 20 años con el VIH. Me infecté, recuerda, hace 28 años por una infidelidad de mi marido. Me tocó un machista que nunca aceptó el condón, por eso hoy le digo a todas las mujeres y muchachas que lo pidan en todas sus relaciones, porque antes no sabíamos, pero hoy tenemos que exigir ese derecho.

El documental, que se difundirá en diversas alcaldías de la capital del país, podrá consultarse en la página electrónica de AHF México (pruebadevih.com), así como en redes sociales.