En la firma de acuerdo por el cual la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) brindará asesoría y asistencia técnica a los elementos de la Guardia Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador garantizó que habrá seguridad sin violación de garantías individuales, porque se dará un giro a la labor de las fuerzas armadas con el propósito de que con su honestidad y profesionalismo ayuden a enfrentar la inseguridad y la violencia.

Después de que la alta comisionada Michelle Bachelet sostuvo que en un país con 40 mil desaparecidos, miles de asesinatos y feminicidios no se puede lograr la seguridad sin pleno respeto a los derechos humanos, porque de lo contrario se genera un ciclo creciente de violencia, el jefe del Ejecutivo federal aseveró que cuando el Ejército “no ha actuado de manera correcta, se ha desviado, ha sido por instrucciones de la autoridad civil; de manera destacada y dolorosa, durante la represión de 1968 contra los estudiantes.

En ese entonces, y es algo que deberemos revisar, la orden la dio el presidente (Gustavo Díaz Ordaz) y la ejecutó el Estado Mayor Presidencial, un cuerpo de élite vinculado a la Presidencia que ya no existe en este gobierno.

Otro hecho lamentable fue dar la orden al Ejército de enfrentar la violencia con la violencia hace dos sexenios (en el gobierno de Felipe Calderón), que nos llevó a esta crisis de inseguridad, de desaparecidos, de violaciones a los derechos humanos.

Como Presidente jamás daré la orden a las fuerzas armadas de reprimir al pueblo, y vamos a garantizar la seguridad sin violar derechos humanos, resaltó López Obrador, quien celebró que México se abra al escrutinio internacional en la materia. En el caso de la ONU, dijo, también asesorará en el uso moderado de la fuerza.

Tras la firma del acuerdo marco, Bachelet subrayó que no podían estar al margen de un nuevo esfuerzo de México por modificar el paradigma de la violencia que se ha impuesto en este país, porque cuando los derechos humanos no se respetan en la lucha contra la delincuencia, se genera un ciclo creciente de violencia.

En Palacio Nacional –donde se firmó el acuerdo durante la conferencia de prensa matutina, cuando se esperaba un acto formal– Bachelet señaló que la Guardia Nacional representa una oportunidad para construir una corporación que haga compatible la obligación del Estado de proveer seguridad a la población y salvaguardar sus derechos humanos.

Celebró el consenso alcanzado en una materia especialmente compleja y puso a disposición de las autoridades mexicanas la experiencia de su oficina en México en la construcción de política pública, indicadores, armonización legislativa, capacitación, documentación de casos y participación de la sociedad civil.

“Esta será una nueva contribución de mi oficina con un compromiso de largo plazo que permita tener cuerpos de seguridad confiables, efectivos y respetuosos de los derechos humanos… sin duda, aportará a un efecto transformador positivo para que seguridad y derechos humanos vayan siempre de la mano”, sostuvo.

López Obrador consideró que la firma del acuerdo –que formalmente realizaron los secretarios de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y de Seguridad Pública, Alfonso Durazo– es histórica por el acompañamiento que dará la ONU para garantizar la paz y la tranquilidad en el país. Eso incluye supervisión en las leyes secundarias de la Guardia Nacional. Este jueves se dará a conocer quién será el titular y los integrantes del Estado Mayor.