Moscú. La aviación del Ejército Nacional Libio (ENL), al mando del mariscal Jalifa Belqasim Haftar, atacó una base militar del Gobierno de Unidad Nacional, ubicada en Mitiga, al noreste de Trípoli, informó este jueves la televisión Sky News, que cita a su corresponsal.

La Organización Mundial de la Salud dijo que los combates en las cercanías de Trípoli, capital libia, dejaron al menos 56 muertos y 266 heridos en los últimos seis días. Miles de personas huyeron de sus hogares y otros tantos están atrapados en las zonas de enfrentamieto. Los hospitales reciben heridos todos los días, indicó la agencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en un comunicado.

Haftar lanzó una ofensiva para avanzar hacia Trípoli, donde tiene sede el Gobierno de Unidad Nacional, respaldado por la ONU, lo que ha intensificado la crisis en este país sumido en el caos desde 2011, cuando fue asesinado el líder libio Muammar Kadafi, con el apoyo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

António Guterres, secretario general de la ONU, exigió un cese del fuego en Libia para evitar una sangrienta batalla en la capital, luego de una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad.

Todavía se pueden parar los enfrentamientos; estamos a tiempo de evitar que suceda lo peor, declaró Guterres ante la prensa tras dos horas y media de negociaciones con el órgano de Naciones Unidas.

El Consejo de Seguridad, que se reunió a puerta cerrada por invitación de Reino Unido y Alemania para debatir un proyecto de resolución en el cual se solicita un cese del fuego, deberá adoptar próximamente un texto que pide el fin de los enfrentamientos, según diplomáticos.

Mientras, la Unión Europea (UE) apremió a sus socios internacionales a influir en los bandos enfrentados en Libia para dejarles en claro que la crisis no tiene una solución militar, de acuerdo con una declaración de Federica Mogherini, jefa de la diplomacia europea.

La ofensiva del ENL pone en peligro a civiles, incluidos migrantes y refugiados, y socava el proceso político liderado por la ONU, lo que podría tener graves consecuencias para Libia y toda la región, entre ellas, la amenaza terrorista, agregó la declaración.

El bloque europeo también llamó a cesar de inmediato todas las operaciones militares en Libia y retomar el diálogo político.

En tanto, los combates se intensifican al sur de la capital, blanco desde el pasado jueves de una ofensiva del mariscal Haftar, hombre fuerte de la zona este del país y líder del ENL.