A seis años de distancia del incendio que destruyó la nave mayor del mercado de La Merced, esta se encuentra semiabandonada y los comerciantes aseguran que sus ingresos han disminuido hasta 80 por ciento, lo que ha traído como consecuencia enfermedades entre los locatarios por la pérdida de su patrimonio.

Tal es el caso de Víctor Coronado, quien desde hace más de 10 años se dedica a la venta de dulces típicos en ese centro de abasto, y que tras la conflagración sufrió dos derrames cerebrales provocados, asegura su esposa Silvia Araujo, por la preocupación que le ocasionó haber perdido su único patrimonio.

Ahora es uno de los cientos de comerciantes que ofrecen sus productos en espacios reducidos de lo que queda de la nave mayor; a pesar de que la venta ya no es como antes y ha disminuido de manera considerable.

Lo anterior contrasta con decenas de puestos que fueron rehabilitados como parte de los trabajos de rescate realizados por el gobierno anterior de Venustiano Carranza, pero que están abandonados, lo cual se pudo constatar en un recorrido por el mercado.

Los locatarios dijeron desconocer los motivos por los cuales dichos espacios no han sido utilizados, pese a que fueron entregados en julio de 2018, y criticaron que esto suceda cuando ellos llevan años pidiendo un lugar para trabajar.

En el lugar aún se pueden ver las huellas que dejó el incendio: en el techo de la nave aún se mantiene el color negro casi en su totalidad, con lonas del mismo color que recubren los puestos que están sin utilizar.

Mientras, en los alrededores de La Merced, específicamente en la calle Rosario, donde el Gobierno de la Ciudad de México anunció que reubicará a 520 comerciantes para retomar la reconstrucción del mercado, está llena de vendedores ambulantes que, dijeron, nada tienen que ver con La Merced.

Por ello, exigieron a las autoridades el retiro de esos comerciantes para que los verdaderos locatarios podamos tener el mismo espacio y derecho a vender. Indicaron que están de acuerdo con la rehabilitación de la zona siempre y cuando se respeten los espacios que teníamos adentro.

Asimismo, aclararon que son 700 los comerciantes que todavía no han recuperado sus puestos, motivo por el cual muchos de ellos tuvieron que buscar otra forma de sustento.

Aún no hay fecha para la reconstrucción y eso nos genera incertidumbre, porque sólo hablan de 520 locatarios, pero somos muchos más entre activos, comerciantes ubicados en el área tapiada (de la nave mayor), explicaron.