Soledad, crueldad y esperanza, son las ideas que el pintor Marco Zamudio desarrolla en las obras reunidas en su exposición Alice in the darkness, la cual inspiró la puesta en escena Alicia y la fragilidad del espejo, escrita y dirigida por Adriana Sánchez-Navarro, con producción de la compañía Matari Theatre.

Este montaje tendrá dos únicas funciones hoy y el 4 de mayo, precisamente en la galería La Silvestre Atelier, que aloja la muestra de Zamudio.

El público acompañará a los personajes Alicia (interpretado por la actriz Abril Garza), el Sombrerero (Bernardo Kinoc) y la Reina Roja (Adriana Sánchez-Navarro) en un recorrido por los tres pisos de la casona del siglo XIX, en una experiencia escénica íntima ‘‘por la oscuridad, la locura y lo más profundo de la sique femenina”, explica la directora a La Jornada.

Se trata, añade, de conocer a la Alicia del país de las maravillas que ahora es una niña que se hace mujer, ‘‘y se define con esas tres palabras: soledad, crueldad y esperanza, con las que construimos su historia. Así narramos cómo Alicia va transitando por tres etapas en su relación con el Sombrerero, la cual es pasional y tormentosa”.

Sánchez-Navarro, egresada de la Escuela Nacional de Arte Teatral del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, relata que cuando visitó la exposición de Zamudio le llegaron las ideas para realizar la obra de teatro con la compañía Matari Productions, de la que es directora artística.

La agrupación, cuya trayectoria se inició en Australia, ha participado en festivales como el Latinoamericano en Davis, California; Luminaria de San Antonio, Texas; y el RAW Natural Born Artists, donde fue reconocida como la mejor compañía de artes escénicas de 2015, en Estados Unidos.

Recovecos de la mente

Alicia y la fragilidad del espejo “se gesta con el objetivo de conjuntar el arte plástico y el teatral para explorar desde distintos abordajes los recovecos más oscuros de la mente. Más que hacer obras de teatro, creamos experiencias escénicas, propuestas relacionadas con los demonios humanos.

‘‘El teatro es un acto voyerista; es el deseo y morbo que tenemos todos de ver la vida de otros, porque dentro de ello existe la búsqueda de uno mismo. Por eso hacemos un teatro íntimo, donde las personas puedan estar cerca y respirar lo que respiran los actores, viviendo con ellos y siendo parte de la escena”, explica Adriana Sánchez-Navarro.

Tras la función se efectuará un conversatorio entre público, actores y el artista para abordar los temas planteados en las pinturas de Marco Zamudio y en la pieza escénica.

Los asistentes también podrán apreciar la exposición Alice in the darkness, conformada por más de 40 obras en óleo y carboncillo que muestran la visión particular del artista ‘‘sobre el lado más oscuro de la mente de una mujer sin rostro específico: depresión, locura y erotismo”.

La muestra, que concluirá el 15 de mayo, presenta las series en las que el pintor ha trabajado los recientes cinco años a partir de su aproximación a trastornos mentales tras trabajar en un hospital siquiátrico con 40 pacientes, ‘‘lo que le permitió acercarse a la mente esquizofrénica y conocer su potencial creativo”. Las funciones de Alicia y la fragilidad del espejo serán hoy y el 4 de mayo a las 19:30 horas en la galería La Silvestre Atelier (José Alvarado 7, colonia Roma Norte). El costo del boleto en preventa es de 200 pesos y 250 pesos el día de la función. Incluye una copa de vino. Las entradas se deben adquirir en www.boletia.com. No hay venta de boletos en la galería. Cupo limitado a 35 personas.