Buenos Aires. En un insólito procedimiento, 150 gendarmes y más de 20 carros de asalto fueron utilizados para allanar el Sindicato de Camioneros por un pedido judicial en una causa que no tenía nada que ver con esa organización, sino con el Club Independiente, en cuya dirección estuvo Hugo Moyano, el dirigente del gremio, quien asoció este hecho al papel que desempeñó en el paro nacional y la multitudinaria manifestación del pasado 30 de abril.

Moyano calificó de payasada el allanamiento, que duró seis horas, en el cual no se encontró nada de lo que supuestamente se buscaba. Es la quinta vez que después de alguna acción importante que molesta al gobierno éste utiliza a la justicia y arremete contra este poderoso sindicato.

También acusó al gobierno del presidente Mauricio Macri de estar manejado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), y recordó la gravedad de la situación social y económica del país, al advertir que no dialogará sobre los 10 puntos planteados por el oficialismo en medio de una desfavorable campaña electoral para un supuesto compromiso con la oposición, que ésta también rechaza en su mayoría, y en este caso porque entre los acuerdos figuraría una reforma laboral y previsional que los gremios no van a aceptar.

También le pidió al mandatario que no hiciera más estupideces como el allanamiento, que sólo crea mayor indignación entre los trabajadores, y acusó a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por este operativo innecesario.

Organizaciones sindicales se solidarizaron y decenas de camioneros abandonaron sus tareas para cuidar el sindicato, en un acto de repudio constante, con gritos y cánticos, en medio de gendarmes armados.

En estos momentos los sindicatos y la oposición enfrentan los llamados 10 puntos que dio a conocer Macri, y este lunes sorprendió que también invitó a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner a discutirlos, cuando son rechazados por sus generalidades, sus propuestas peligrosas y por considerarlo un recurso electorero de contenido vacío.

También en el ámbito sindical, conmocionó la muerte de dos trabajadores petroleros en el yacimiento Fortín de Piedra, que está bajo control de Tecpetrol y es uno de los más importantes de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, en el sur del país. Ambos cayeron en una pileta donde se lavan algunos elementos corrosivos.

Son ya ocho obreros muertos en el yacimiento de Vaca Muerta desde que fue flexibilizado el convenio colectivo del sector, en un acuerdo que Macri defendió como modelo favorable a generar las condiciones para que venga la inversión, señaló el diario Página/12.

La abogada del Sindicato Unido de Petroleros Estatales Plaza Huincul, Susana Miras, relacionó el aumento de los accidentes y muertes en los lugares de trabajo con la flexibilización laboral. Fortín de Piedra ha tenido muchos accidentes y seis muertes en los últimos seis meses, declaró.