Martes 14 de mayo de 2019, p. a12
La defensa legal de la medallista olímpica Guadalupe González, sancionada cuatros años por dopaje, cometió diversas inconsistencias en su argumentación, entre ellas la falsificación de documentos y contradicciones en las versiones que entregaron.
Gracias a una prórroga solicitada por la marchista para desahogar más pruebas en su defensa, se integraron los testimonios de los dueños de un camión de comida y una taquería para comprobar la versión de que González había consumido trembolona por ingesta accidental de carne contaminada en los días previos al examen en el que dio positivo.
El argumento de consumo de 200 gramos de carne y posteriormente cinco tacos de pastor que estuvieran contaminados puede aplicar con el clembuterol, pero no para la trembolona
, señala un informe de Juan Pablo Arriagada, miembro de Sport Resolutions, quien describió el proceso ante la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF).
Para recabar testimonios declararon los dueños del camión de comida y de la taquería donde presuntamente habría consumido carne contaminada, pero uno de los señalados dijo no recordar cuándo había acudido la marchista, además de que no suele entregar recibos de servicio.
La investigación de la IAAF determinó que los documentos que presentó la defensa eran falsos para darle forma a la versión que sostuvieron desde el inicio. Advirtió que el camión de comida no da servicio desde hace cuatro años, por lo que González no pudo consumir carne en ese negocio, y el recibo que entregó de la taquería correspondía a un día laboral, pero el establecimiento sólo atiende los fines de semana.
La marchista (30 años) arrojó el resultado positivo el 17 de octubre de 2018 en México.