El Gobierno de la Ciudad de México suspendió labores de bacheo, pintado, pavimentación, así como otras actividades como podas de árboles, que obstruyen el tránsito vehicular, al decretarse la contingencia ambiental atmosférica extraordinaria ante los altos índices de contaminación por partículas finas que ayer rebasaron los 161 puntos, así como por ozono, que alcanzó un valor de 142 puntos.

La restricción de actividades se extendió al barrido de calles, corte de pasto en área de camellones, jardines y campos deportivos. En acatamiento a esta medida, empleados de limpia del Paseo de la Reforma ayer se concentraron a la altura de la calle de Havre, frente a la Glorieta de la Palma, junto a sus instrumentos de trabajo: escobas, recogedores y sus carritos de basura.

La instrucción que recibimos desde temprano fue que sólo hicieramos papeleo, es decir, que nada más sacáramos la basura de los botes hasta terminar el turno, contó uno de ellos.

A estas medidas, también se sumaron las alcaldías, que desde ayer redujeron al mínimo los servicios urbanos que se prestan y las actividades deportivas que se realizan al aire libre en los distintos centros deportivos como natación y futbol.

La planta de asfalto de Coyoacán, donde se producen alrededor de 4 mil toneladas de mezcla asfáltica al día, también dejó de operar desde la noche del pasado lunes.

De acuerdo con el reporte de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, el contaminante con mayor incidencia fue las partículas menores a 2.5 micrómetros (PM2.5) que ayer se mantuvieron desde las nueve a las 13 horas en 161 puntos, mientras que el ozono rebasó los 142 puntos del Índice Metropolinato de la Calidad del Aire.

Por su parte, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México afirmó que no se reporta ningún incremento en el número de atenciones médicas por enfermedades respiratorias que pudieran estar vinculadas a los altos niveles de contaminación que se han registrado en los últimos días por lo que no hay una situación de emergencia.

Sin embargo, recomendó evitar exponerse a las altas concentraciones de contaminantes, especialmente de partículas suspendidas, toda vez que, por ejemplo, representa un riesgo mayor de crisis de asma a quienes sufren esta condición; además de afectaciones en vías respiratorias, irritación ocular y dolor de cabeza, en la población en general.

Destacó que como parte del Programa de Vigilancia Epidemiológica de enfermedades relacionadas con la contaminación, se realiza un análisis cruzado de los ingresos registrados anualmente en los hospitales y centros de salud, y se hace una correlación con los niveles de contaminación, para determinar comportamientos fuera de lo esperado. Por ahora no existe una situación de emergencia.

Según un estudio de la Organización Mundial de la Salud, la contaminación atmosférica, especialmente por particulas finas.