Una niña guatemalteca, de 10 años de edad, murió el miércoles como consecuencia de una caída ocurrida dentro de la estación migratoria de Iztapalapa, informó el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.

Aunque el Instituto Nacional de Migración (INM) dijo en un comunicado que la menor fue atendida por una molestia en garganta, el funcionario precisó que evidentemente esa no fue la causa de la muerte.

En tanto, integrantes de grupos civiles se manifestaron afuera de Palacio Nacional para asegurar que el gobierno mexicano viola la ley de la niñez al detener en estaciones a menores de edad.

El subsecretario respondió que la prohibición se refiere a menores de edad que viajen solos; por otro lado, quienes estén con su familia no pueden ser separados del núcleo de adultos, adujo. Admitió, sin embargo, que las estaciones no son espacios ideales para los pequeños.

Lamentablemente tuvimos el deceso de una niña guatemalteca que viajaba con su madre, una niña de 10 años, que sufrió un accidente dentro del dormitorio en donde estaba con su mamá al caerse de una litera y fue fundamentalmente el trauma del golpe lo que ocasionó su deceso, señaló en entrevista.

Dijo que se abrió una averiguación previa para determinar un eventual caso de negligencia. La madre de la menor volvió ayer a Guatemala con el cadáver de su hija. Días antes habían sido trasladadas por tierra desde Chihuahua, al frustrarse su intención de ir a Estados Unidos.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala informó que la familia ha tomado la decisión de no dar a conocer ninguna información, material gráfico o declaraciones relacionadas a su caso particular. La cancillería guatemalteca dijo que se apega a la Ley de Protección Integral de la Niñez y la Adolescencia sobre el interés superior del menor y la reserva de datos sensibles de identificación.

Exige CNDH indagatoria

El gobierno mexicano debe realizar una investigación exhaustiva para determinar las causas de la muerte de una pequeña migrante de origen guatemalteco que estaba retenida en la estación migratoria Las Agujas, en la Ciudad de México; además de brindar medidas cautelares a sus familiares para que se les otorguen todas las facilidades de estancia regular en el país para realizar los trámites necesarios por el fallecimiento de la menor y garantizarles ayuda, atención, asistencia, acceso a la justicia y a la verdad.

Así lo demandó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), luego que el Instituto Nacional de Migración (INM) informó el jueves sobre la muerte de la pequeña, quien junto con su madre se encontraba retenida en la estación migratoria desde días atrás.

El 16 de mayo en la estación Las Agujas personal del INM recabó la queja con un familiar de la víctima que señaló que la niña y su madre se sentían mal de salud desde días antes y el médico del centro migratorio les indicó que presentaban infecciones en garganta, oídos y pulmones y que su tratamiento duraría cuatro días. El quejoso señaló que su hermana le informó el martes que su sobrina había fallecido.

Independientemente a la investigación que la CNDH realiza por violaciones a derechos humanos, se solicita (a las autoridades) una indagación exhaustiva para determinar si la menor recibió la atención requerida y oportuna por el personal médico y operativo de esa estación migratoria, para deslindar las responsabilidades correspondientes y, en su caso, se dé vista a las instancias de investigación administrativas del INM y de justicia.