El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, por conducto del director del Instituto de Ciencias Forenses (Incifo), Felipe Takajashi, ofreció una disculpa pública a la familia de Lesvy Rivera Osorio por la falta de debida diligencia reforzada en el peritaje de necropsia, en la que se omitió tratar su cuerpo con dignidad y respeto.

La violencia de género cobra cada vez más vidas, por lo que el tribunal debe actualizar su guía técnica para la elaboración de necropsias en casos de feminicidio, consideró Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal.

Como médicos forenses saben que deben utilizar material quirúrgico para tomar muestras, no cuchillos, pero se convierten en carniceros al descuartizar los cuerpos, y en este caso nos defraudaron por las porquerías que hicieron, afirmó Irinea Buendía.

Las palabras de la representante de la organización Madres en resistencia luchando por el acceso a la justicia generó molestias entre el personal del Incifo, quienes rechazaron tales aseveraciones.

Iván Escartín, perito médico forense, las calificó de ofensivas, pues somos profesionales, y solicitó una audiencia al presidente del TSJ, Rafael Guerra, para informarle de las irregularidades operativas y la crisis que vive el instituto.

En el auditorio Miguel Gilbón Maitret, Araceli Osorio, madre de Lesvy, joven encontrada sin vida en Ciudad Universitaria el 3 de mayo de 2017, aceptó la disculpa, pero dijo que hay una deuda enorme en materia de feminicidios y no pararemos hasta encontrar justicia.

Takajashi señaló que era necesario asumir la responsabilidad al no realizar con perspectiva de género y con los lineamientos establecidos en la Guía técnica para la elaboración de necropsias bajo el caso de feminicidio, la intervención de la joven.

Se comprometió a investigar y sancionar las acciones u omisiones de los servidores públicos que obstaculicen el acceso a la justicia para las víctimas, para evitar la impunidad.

La presidenta de la CDHDF destacó que este acto derivó de la recomendación 01/2018.