Analistas financieros consultados a finales de mayo pasado por el Banco de México (BdeM) redujeron de 1.52 a 1.32 por ciento la previsión de crecimiento para este año. Estimaron una inflación mayor a la vaticinada hace un mes y, por vez primera vez desde la crisis de 2009, ninguno de los entrevistados consideró que el actual sea un buen momento para invertir en el país, según los resultados de la muestra, que fueron difundidos ayer.

Los 39 grupos de análisis –nacionales y extranjeros– estimaron que la economía no está mejor que hace un año, deterioro a la ya de por sí opinión pesimista de hace un mes, cuando 3 por ciento de los consultados compartían esa visión.

Según los consultados, los principales riesgos para el crecimiento económico son: incertidumbre política interna; problemas de inseguridad pública; plataforma de producción petrolera; desasogiego por la situación económica interna; debilidad del mercado externo y la economía mundial; política de gasto público, y ausencia de cambio estructural en México.

De acuerdo con la encuesta –llevada a cabo entre el 23 y el 30 de mayo, antes antes de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que impondría impuestos a todas las exportaciones mexicanas si no se pone freno a la migración indocumentada–, la totalidad de los analistas consultados piensa que actualmente la economía no está mejor que hace un año.

El porcentaje de especialistas que estima que es buen momento para realizar inversiones disminuyó de 5 por ciento a cero en relación con el sondeo anterior.

Por el contrario, la fracción que considera que es mal momento para invertir aumentó en relación con el mes previo, al pasar de 58 a 62 por ciento.

En mayo anterior las expectativas sobre inflación y tipo de cambio aumentaron, mientras la de crecimiento bajaron respecto del mes pasado.

Se prevé que a finales de 2019 se deteriorá la cotización del peso frente al dólar, al pronosticarse en 19.92 pesos por billete verde, en relación con la estimación del mes previo, que era de 19.90.

Hacia el término de 2020 se espera que se depreciará y llegará a 20.41 pesos por dólar, superior a la previsión del mes anterior: 20.34.

También se redujo la estimación de generación de empleos para 2019. Se plantea que será de 528 mil, contra 550 mil en abril de 2019.

Para 2020 se deterioró la proyección, al calcularse que será de 556 mil, por abajo de lo que opinaban un mes atrás: 558 mil.

Además, se advierte que el nivel de inflación en 2019 terminará en 3.75 por ciento, superior al 3.66 por ciento que anticipaban el mes pasado. Así, se ubicaría por arriba del objetivo: 3 por ciento, pero dentro del intervalo de variabilidad (2-4 por ciento) establecido por el BdeM.

Para 2020 se pronostica un menor nivel de inflación en relación con 2019. Se considera que será de 3.65 por ciento, cifra por arriba de la que se estimaba un mes atrás, cuando era de 3.60 por ciento. Aunque se alejó del objetivo, se mantuvo dentro del rango fijado.

En cuanto al nivel de la tasa de interés de los Certificados de la Tesorería de la Federación a 28 días de plazo de vencimiento para los cierres de 2019 y 2020, aumentaron en relación con la encuesta de abril anterior. Pasó de 7.93 en el cuarto mes del año a 8.03 en mayo. Para 2020 se incrementó de 7.05 a 7.50 por ciento.