El presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, invitó a los ciudadanos a mirar con benevolencia a todos los migrantes que cruzan el territorio nacional con el fin de llegar a Estados Unidos, y a las autoridades que se atengan a las leyes del país.

A que nadie se exceda para que México también se distinga en este concierto internacional por su humanismo y por su apego a las leyes y el respeto a los derechos humanos, dijo.

Cualquier opinión que denueste, que hable mal de un migrante no es digna de ser escuchada. Sobre todo los mexicanos que somos un país de migrantes, expresó el arzobispo en un mensaje en Monterrey.

Expuso que los migrantes que vienen de Centroamérica o de África también deben gozar de los mismos derechos que nosotros hemos defendido para nuestros compatriotas. Sabemos que es un momento delicado de las relaciones internacionales, no sólo entre México y Estados Unidos, sino también en muchos países de Europa se debate la cuestión de cuál es el lugar que deben ocupar los migrantes y refugiados, hasta dónde es un deber internacional acogerlos y hasta dónde tiene que llegar el sentido humanitario.

Se pronunció en contra de las cacerías de migrante y reiteró: Es cierto que hoy hay fragilidad en las relaciones internacionales y que nuestro gobierno tratará siempre de equilibrar sus deberes que tiene frente a otras naciones pero también los deberes que marcan nuestras políticas internas.