Martes 18 de junio de 2019, p. 5
París. El revólver con el que supuestamente se suicidó Vincent van Gogh (1853-1890), conocido como ‘‘el arma más famosa de la historia del arte’’, será subastado mañana en París.
Esa arma Lefaucheux, calibre 7 milímetros, está estimada entre 40 mil y 60 mil euros (45 mil y 67 mil dólares). Será rematada por la casa AuctionArt-Rémy Le Fur en el Hôtel Drouot.
Van Gogh se disparó una bala en el pecho a los 37 años y murió dos días después al norte de París.
El 27 de julio de 1890 el maestro holandés habría caminado hasta un campo cercano al albergue en Auvers-sur-Oise, donde se hospedaba, se habría levantado la camisa y disparado en el pecho con el arma del propietario del establecimiento.
El revólver le habría caído de las manos y Van Gogh, herido, habría regresado al albergue, donde murió dos días después.
Ese revólver, cuya autenticidad es probable que no sea nunca confirmada formalmente, fue descubierto en 1965 por un agricultor en el mismo campo. Tras su hallazgo, el campesino entregó el arma –muy dañada– a Arthur Ravoux, propietario del albergue. Desde entonces ésta había permanecido en la familia, colgada detrás del mostrador, según la casa AuctionArt.
Fue presentado públicamente por primera vez en 2012 con la aparición de un libro, Aurait-on retrouvé l’arme du suicide? (¿Se halló el arma del suicidio?) sobre la historia del revólver. Varios indicios hacen verosímil la hipótesis de que el autor de obras maestras como Los Girasoles y La noche estrellada se habría suicidado con esa pistola.
Además de ser hallada en el mismo lugar donde el pintor se disparó, el calibre corresponde al descrito por el doctor Paul Gachet, quien lo asistió durante su agonía y la naturaleza de la herida concuerda con la débil potencia del arma.
Finalmente los estudios científicos determinan que el revólver permaneció enterrado en el suelo durante 75 años, el tiempo transcurrido hasta su hallazgo.
En 2016, el museo que lleva su nombre en Ámsterdam presentó el arma en la exposición En los confines de la locura, la enfermedad de Vincent van Gogh.
El artista se había instalado en Auvers-sur-Oise dos meses antes de su suicidio, aconsejado por su hermano Théo, tras haber pasado un año en un asilo para enfermos mentales.
En 1888, Van Gogh se había cortado una oreja tras una agria disputa con su amigo y pintor Paul Gauguin y se la había ofrecido a una prostituta.
En su etapa en Auvers-sur-Oise, Van Gogh se hallaba en la apoteosis de su carrera, pintando más de una obra diaria, pero a la vez era víctima de grandes crisis sicológicas que se acentuaron poco antes de su muerte.
Otra teoría sobre el origen del arma, muy controvertida, fue presentada en 2011 por dos investigadores estadunidenses según los cuales Van Gogh no se suicidó, sino que fue víctima de un disparo accidental por parte de dos hermanos adolescentes que jugaban con un arma.