El Cairo. El derrocado ex presidente egipcio Mohamed Mursi, líder del movimiento de la Hermandad Musulmana, murió ayer luego de acudir a una audiencia en un tribunal en esta capital, donde era juzgado por terrorismo y espionaje.

Su deceso fue provocado por “un paro cardiaco”, informó la televisión estatal de Egipto, que citó fuentes médicas.

“El tribunal le otorgó el derecho de hablar cinco minutos. Mursi cayó al suelo en el banquillo de los acusados y fue llevado al hospital”, donde murió, indicó la fiscalía.

Un año después de la caída de Hosni Mubarak (1981-2011), Mursi ganó las elecciones, pero su periodo apenas duró un año al ser destituido el 3 de julio de 2013 por un golpe de Estado encabezado el ahora presidente Abdelfatah al Sisi; desde entonces permaneció preso.

La Organización de las Naciones Unidas, Turquía y Catar lamentaron el deceso. El Partido de la Libertad y la Justicia, brazo político de la Hermandad Musulmana, y Human Rights Watch denunciaron las “malas condiciones” de su reclusión.