La comisión de Educación del Senado trabajó ayer con prisas y a marchas forzadas, para examinar a los aspirantes a integrar la Junta Directiva del Organismo para la Mejora Continua de la Educación. Ante los integrantes de esa instancia legislativa comparecieron ayer 41 de los 42 aspirantes que se registraron para formar parte de la instancia que sustuirá al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE). Uno no llegó.

Axel Didriksson, investigador universitario, ex secretario de Educación del Distrito Federal, ex director de Ciencia de la Ciudad de México, manifestó que la desigualdad social impacta directamente en la inequidad educativa y, por tanto, se deben desarrollar políticas y estrategias que pongan en el centro el combate a la desigualdad y la inequidad, desde una perspectiva de una nueva regionalización.

Dijo que en la cúspide del sistema educativo están las universidades autónomas y los institutos de educación superior, los cuales deben ser convocados para lograr articular todo el sistema.

Juan Carlos Palafox, quien ha sido consultor a nivel internacional en el Banco Mundial y en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, así como ex funcionario de la Secretaría de Educación Pública (SEP), aseguró que el rezago, bajo rendimiento y la inequidad educativa son los principales retos del sistema educativo mexicano.

Ante ello propuso retos para generar alianzas que convoquen a la sociedad para solucionar sus problemas desde la base; instrumentar gestiones diferenciadas que atiendan los distintos sectores sociales y que los sistemas de evaluación aporten información útil para los tomadores de decisiones.

A cada uno de los comparecientes apenas les concedieron 13 minutos para presentar su exposición y responder preguntas de los legisladores. Hoy comparecen 38 aspirantes al Consejo Técnico de Educación del nuevo organismo: también será una sesión maratónica.