La titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseguró que la protesta de policías federales no pone en riesgo la gobernabilidad del país, aunque advirtió que algunos de ellos tienen sus propios intereses no tan legítimos.

“No tengo idea de quién es la mano negra (detrás del movimiento de federales), pero siempre en una manifestación hay intereses legítimos, pero también en algunas ocasiones hay personas que tienen sus propios intereses no tan legítimos”, dijo en entrevista.

Algunos policías federales, señaló, no han aprobado los exámenes de ingreso a la Guardia Nacional por problemas de obesidad, sobrepeso o de visión, por lo que pueden ser adaptados a funciones de protección civil o al Instituto Nacional de Migración.