Guadalajara, Jal., Colectivos ambientalistas y habitantes de la comunidad de Temacapulín, municipio de Cañadas de Obregón, que se oponen a la presa El Zapotillo y la semana pasada se entrevistaron con el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Manuel Toledo Manzur, y la directora de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez Cisneros, así como con Lázaro Cárdenas Batel, jefe de asesores del presidente Andrés Manuel López Obrador, exigieron que se deseche el acuerdo de entendimiento que el 29 de junio firmaron los gobernadores de Jalisco, Enrique Alfaro, y de Guanajuato, Diego Sinhué Rodríguez, para repartirse el agua del embalse.

Informaron que Toledo visitará a finales de julio los pueblos que resultarían afectados para buscar alternativas de gestión integral del agua que no impliquen continuar la construcción de El Zapotillo, mientras la directora de la Conagua les dijo que aunque este año se aprobaron 500 millones de pesos para la presa sólo se usarán 270 para el mantenimiento y la seguridad de la infraestructura construida.

En un comunicado, exigieron al gobierno federal detener la aprobación del convenio y demandaron al gobernador Enrique Alfaro una mesa de trabajo de alto nivel con las comunidades afectadas y productores de la región de los Altos de Jalisco, en la cual se transparente y revise el acuerdo de entendimiento y se den garantías para cumplir la recomendación 50/2018 de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, que pidió una consulta con habitantes de los poblados afectados.

En el documento se recuerda que el proyecto original, iniciado en 2006, tenía un presupuesto de 7 mil 960 millones de pesos, y el costo de la obra se elevó a 35 mil 339 millones, pero si la altura de la cortina se aumenta de 80 a 105 metros, como pretenden los gobernadores de Jalisco y Guanajuato, podría llegar a 71 mil millones de pesos.

Las organizaciones señalaron que durante la reunión de la semana pasada en la Semarnat Lázaro Cárdenas Batel dijo que habitantes de las comunidades que resultarían afectadas deben participar en reuniones para definir el futuro de la presa.

Añadieron que Toledo comparó El Zapotillo con el aeropuerto de Texcoco, estado de México, por el aumento de costos y señaló que es urgente revisar al proyecto.