En mayo pasado el valor de la producción en la construcción se desplomó 10.3 por ciento respecto del año anterior, señala un reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este revés, de acuerdo con datos oficiales, es el más alto desde septiembre de 2013.

A tasa anual, las horas trabajadas en el sector cayeron 5.2 por ciento, el personal ocupado fue menor en 4.7 y las remuneraciones medias reales bajaron 0.7, según cifras ajustadas por estacionalidad.

Respecto de abril pasado, el deterioro en el rubro fue de 3.1 por ciento en el valor de la producción, con lo cual se acumulan 11 meses en los que el sector va en picada.

El personal ocupado descendió 0.3 por ciento y las remuneraciones medias reales disminuyeron 0.2, en tanto que las horas trabajadas aumentaron 2.3.

Los datos que recupera el Inegi se dan a la par de la información de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, que reportó de enero a mayo el hundimiento de 16.4 por ciento en el gasto para inversión física en el país, 33 mil 543.4 millones de pesos menos que en 2018.

Consultado sobre el tema el pasado 15 de julio, Javier Jiménez Espriú, secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), aseguró: si estamos hablando desde el punto de vista nacional, puede ser que sí haya pocas inversiones y esté deprimido el sector de la construcción. No es el caso de la SCT, tenemos prácticamente comprometido todo el presupuesto de la secretaría.

Al dar cuenta de los proyectos y el gasto ejercido, Cedric Escalante, subsecretario de Infraestructura, aseguró: Llevamos un buen avance en términos físicos y financieros, y consideramos que precisamente es la secretaría la que está incidiendo en el ejercicio de los recursos públicos.