Ante el homicidio de un migrante hondureño en Coahuila, el Instituto Nacional de Migración (INM) informó que otorgará estancia regular a los familiares de la víctima, así como a los testigos del suceso, al tiempo que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) indicó que ya se puso en contacto con la pequeña hija del trabajador internacional asesinado, a fin de brindarle ayuda sicológica y ayudarla a regresar por avión a su país, donde se reunirá con su madre.

El INM respondió ayer a las medidas cautelares emitidas por la CNDH e informó que dará asesoría y facilidades para que los migrantes que se encuentran en la estación provisional de Saltillo, Coahuila, familiares de la persona que murió, tengan acceso a una estancia regular en el país.

Esta condición también se otorgará a quienes presenciaron el evento del pasado 31 de julio.

El instituto proporcionará alojamiento alternativo a los afectados que se encuentran en la mencionada estación en tanto se resuelva su situación jurídica, garantizando el principio de unidad familiar e interés superior de las niñas, los niños y adolescentes. Además, señaló el INM, se dará apoyo para gastos funerarios y el traslado del cadáver a su lugar de origen.

En el caso de las personas que de forma expresa soliciten su retorno asistido, el instituto gestionará esta alternativa vía aérea, añadió.

Por su parte, la CNDH informó que ha realizado diversas gestiones en favor de los migrantes agredidos presuntamente por el Grupo de Operaciones Especiales de Coahuila, especialmente los menores de edad que presenciaron eventos traumáticos, con el fin de que se reúnan con sus familiares y se resuelva su situación migratoria para que retornen a sus países de origen.

Mediante un comunicado, el organismo público indicó que el quinto visitador general, Édgar Corzo Sosa, y personal especializado en medicina y sicología, entrevistaron a una niña de ocho años, hija del hondureño que murió, y se encontraron también con un menor salvadoreño de dos años, quien fue separado de su madre y hermana durante un operativo de detención.

En ambos casos, dijo la CNDH, ya se han realizado gestiones ante la Procuraduría para Niños y Niñas y la Familia de Coahuila, a fin de llevar a cabo sendas convivencias familiares y proceder al retorno de las personas a sus respectivos países.

En el caso de la menor hondureña, la convivencia sería con un tío que se encuentra en una estación migratoria, para después ser enviada con su madre a su lugar de origen. En cuanto al niño, será reunido con su madre y su hermana luego de que se compruebe su vínculo familiar, precisó.