El riesgo de un nuevo desabasto del medicamento metotrexato para tratar el cáncer en los niños tardará en desaparecer por lo menos un año si se resuelve el asunto administrativo por el que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) suspendió la línea de producción del laboratorio Pisa, único en el país que cuenta con la materia prima para elaborarlo.

Esto es así porque a escala internacional hay carencia del ingrediente principal desde hace alrededor de seis meses. De ahí que aunque otros cinco laboratorios poseen registro sanitario del quimioterapéutico, el producto no está disponible.

Otro medicamento que también sólo fabrica Pisa en México es el sulfato de efedrina, indispensable en los quirófanos para ayudar a los pacientes, en casos específicos, a recuperarse de la anestesia. Este producto empezó a escasear en algunos hospitales debido al retraso de la importación de la materia prima.

La sustancia se elabora en Alemania, cuya autoridad regulatoria tardó tres meses en verificar la documentación que, a su juicio, contenía algunas inconsistencias. Al término del plazo liberó el permiso de exportación del sulfato de efedrina. Fuentes del sector indicaron que éste ya se encuentra en el país y sólo se espera que la Cofepris concluya el análisis de las muestras que tomó hace un par de semanas a fin de emitir la autorización para su ingreso. En las siguientes tres a cinco semanas se iniciará la producción del medicamento.

Altos niveles de control

Resaltaron que el sulfato de efedrina es un producto con altos niveles de control, con lo cual se previene cualquier desvío y mal uso, pues es precursor para fabricar drogas ilícitas.

Los funcionarios recordaron que por el riesgo que implica su manejo, el laboratorio que lo utiliza debe cumplir medidas estrictas de seguridad y se encuentra bajo vigilancia permanente de la autoridad sanitaria. Por ahora, sólo el laboratorio nacional Pisa asume ese riesgo y por lo mismo es el único proveedor para el sistema nacional de salud. Las fuentes consultadas explicaron que aunque hay otras sustancias que pueden utilizar los anestesiólogos, tienen más riesgo de complicaciones.

Con el sulfato de efedrina, en manos expertas, los pacientes se recuperan muy bien y no tienen efectos adversos. Puntualizaron que este medicamento debe tenerse en el quirófano por si es necesario.

El caso del metotrexato es diferente, porque a causa de la escasez mundial de materia prima está latente el riesgo de desabasto y, como se vio la semana pasada, el mayor problema es para los niños con cáncer, pues si tienen este producto como parte de su terapia, no existe otro para sustituirlo, comentaron los entrevistados.

Lo que se necesita en lo inmediato es que la Cofepris retire la suspensión de la línea de producción de Pisa que ordenó en mayo pasado. La causa fue una supuesta falta de validación de documentos, pero nada que tenga que ver con la calidad del proceso de manufactura. Con la materia prima que el laboratorio posee puede garantizar el abasto de metotrexato durante los próximos ocho a 10 meses, afirmaron.