Una caminata de 40 minutos realizó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, del recinto legislativo de Donceles y Allende al Antiguo Palacio del Ayuntamiento, tras dar un mensaje por su primer Informe.

Al llegar al edificio donde despacha desde el 5 de diciembre de 2018, enfilada hacia su oficina decidió regresar a la puerta que ya se cerraba para advertir que no necesita vallas metálicas ni seguridad personal para caminar por las calles de la capital, e instruyó al personal de resguardo que dejaran abierto el acceso.

Algunas personas se congregaban afuera del edificio, al igual que un grupo de residentes de Iztapalapa que la acompañó en su recorrido y con quienes se tomó selfies.

Poco antes de las 9:30 de la mañana, ataviada con un conjunto de dos piezas color fucsia y zapatos de tacón, Sheinbaum llegó a pie por la calle Donceles; después del mediodía salió por la misma calle y saludó a habitantes de Iztapalapa que llegaron desde las cuatro de la mañana, quienes recibieron una torta y un jugo, pero negaron ser acarreados, pues, aseguraron, sólo iban a ver el Informe en una pantalla gigante que se instaló frente al Congreso.

Colonos de las alcaldías Álvaro Obregón, Tláhuac, Xochimilco y Azcapotzalco también estuvieron presentes, quienes tras las vallas metálicas vieron desfilar a funcionarios y legisladores invitados. Algunos recibieron muestras de apoyo, como el senador de Morena Martí Batres, en contraste con su homóloga del PAN, Xóchitl Gálvez, quien recibió gritos de ¡fuera!, ¡fuera! y ¡fuera Xóchitl!

La muchedumbre escuchó en silencio el discurso de la mandataria y sólo hubo aplausos cuando mencionó la cancelación del proyecto para construir una plaza comercial en el Cetram Constitución de 1917.

Hubo mayor reacción de los asistentes a los posicionamientos de las bancadas, abucheos y gritos de ¡fuera!, ¡fuera! al panista Christian von Roehrich, los cuales cambiaron por aplausos cuando tocó el turno al diputado de Morena Ricardo Ruiz.

De buen humor, la mandataria bromeó cuando le preguntaron si no se había cansado. Respondió que no y entonó la canción del grupo Bronco con zapatos de tacón.